Cuatro supuestos asesinos del presidente haitiano, Jovenel Moise, fueron abatidos por la Policía y otros dos fueron detenidos este miércoles, anunció el director general de la Policía, Léon Charles.
En la operación también fueron liberados tres agentes de la Policía que habían sido secuestrados por los supuestos autores del magnicidio, según detalló el responsable de la Policía en una comparecencia al lado del primer ministro interino, Claude Joseph, y otras autoridades.
Los presuntos asesinos fueron interceptados por la Policía tras un intenso tiroteo en el sector de Pelerin, donde se encuentra la residencia de Moise, “poco antes de las 6 de la tarde”, según adelantó el secretario de Estado de Comunicación, Frantz Exantus, a través de Twitter.
Mercenarios profesionales
Además se conoció que eran mercenarios “profesionales” que se hicieron pasar por agentes de Estados Unidos.
“Fue un ataque bien planificado y eran profesionales”, dijo el embajador Bocchit Edmond a periodistas. “Tenemos un video y creemos que eran mercenarios”.
Los asesinos se presentaron en la residencia del mandatario haitiano como agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA), pero su comportamiento no era acorde con el de miembros de la agencia estadounidense, añadió Edmond.
Con relación al estado de salud de la primera dama, Martine Moise, también herida en el ataque, aseguró que se encuentra “fuera de peligro”, después de haber sido trasladada a un hospital de Miami, (Estados Unidos).
“Afortunadamente, muchos sectores en la oposición condenaron el asesinato”, dijo Joseph, quien horas antes había pedido expresamente a la oposición sumarse a la repulsa del magnicidio.
¿Eran colombianos?
En la comparecencia, el ministro de Cultura y Comunicación, Pradel Henríquez, reiteró que los atacantes son extranjeros que hablan español e inglés, pero no aportó detalles sobre su nacionalidad o identidad.
Medios haitianos hablan de la posibilidad que los sicarios sean de origen colombiano y venezolano, pero es una versión que todavía no ha sido confirmada por las autoridades. El periodista Alexander Gálvez, menciona que el primer ministro Claude Joseph mencionó esta información a la prensa local.
“El presidente haitiano dijo las siguientes palabras: esos bandidos están conformados por colombianos, venezolanos y haitianos. En los videos se ve la salida rápida y portaban armas muy peligrosas”, habría mencionado, según la versión de Gálvez.
El diario El Día de Santo Domingo, citando fuentes oficiales, afirma que un documento confidencial señala que se debe detener e investigar a cualquier ciudadano colombiano que pretenda salir de República Dominicana.
Lo que si se conoce es la posibilidad que hayan abandonado el país, probablemente a República Dominicana.
“No sabemos si se fueron”, dijo. “Si no están en el país en este momento, solo hay una forma de salir y es a través de las fronteras porque no hay aviones”.
Dijo que las autoridades de aviación civil habrían detectado un avión privado, pero que el movimiento a través de la frontera podría haber pasado desapercibido.
Estado de sitio
Joseph declaró además el estado de sitio por 15 días en el país tras el maginicidio y aseguró "se han tomado todas las medidas para asegurar la continuidad del Estado".
"Pido a todas las fuerzas vivas de la nación acompañarnos en la batalla, a acompañarnos en la continuidad del Estado", dijo el jefe de Gobierno.
Reiteró que la situación de seguridad del país está "bajo control" por parte de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas y pidió a la población que mantenga la calma.
En un decreto, se estableció que el estado de sitio estará en vigor durante quince días, plazo en el que se ordenó movilizar todas las fuerzas de seguridad para llevar a cabo la investigación sobre el asesinato, así como para implementar medidas de seguridad especiales.
Las fuerzas de seguridad también estarán facultadas para "para prohibir todas las reuniones que juzgue que puedan alentar o mantener el desorden" en el país.
Asimismo, Joseph aseguró que los autores del asesinato de Jovenel Moise serán llevados a la Justicia y expresó su simpatía con la familia, amigos y aliados del presidente Moise, a quien describió como un hombre "muy valiente".
Las calles de Puerto Príncipe se mantienen en calma, prácticamente vacías, tras el magnicidio, y la Policía controla los accesos al barrio de Pelerin, donde se encuentra la residencia de Moise.