Con una misa en la catedral de Rionegro, los familiares y amigos del exsenador Rubén Darío Quintero, celebraron que volviera a la libertad luego de haber sido condenado por la Corte Suprema de Justicia (CSJ) a siete años y seis meses de prisión por el delito de concierto para delinquir agravado, por sus nexos con las autodefensas.
En una carta abierta, Quintero indicó que después de pensar mucho en el origen del proceso en su contra concluyó que se le cobró su cercanía con el expresidente Álvaro Uribe. Indicó que pasó más de 1.100 días en la cárcel y juró ante Dios que nunca tuvo nexos con alias John Fredy Rendón (alias El alemán).
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