Richard Holbrooke, el diplomático estadounidense que medió el acuerdo que puso fin a la guerra en Bosnia y sirvió como enviado especial del presidente Barack Obama para Afganistán y Pakistán, murió este lunes.
El veterano diplomático de 69 años, cuya carrera en el gobierno se extendió durante casi cinco décadas y pasó de ser un diplomático menor en el Vietnam del Sur a embajador de Estados Unidos en Alemania y Naciones Unidas, murió después de una cirugía para reparar un desgarro en su arteria aorta.
El funcionario se sintió enfermo el viernes durante una reunión con la secretaria de Estado Hillary Clinton en las dependencias del Departamento de Estado, y fue llevado a un hospital de Washington, en el que fue sometido a horas de cirugía para intentar salvar su vida.
"Michelle y yo estamos profundamente triste por la muerte de Richard Holbrooke, un verdadero gigante de la política internacional estadounidense que ha hecho a nuestro país más fuerte, seguro y más respetado", dijo el presidente Barack Obama en un comunicado.
"El fue verdaderamente una figura única que será recordada por su diplomacia sin descanso, amor al país y búsqueda de la paz", agregó Obama, destacando que Holbrooke había servido como secretario de Estado adjunto tanto para asuntos del Este de Asia y Europa.
En tanto, la secretaria de Estado Clinton declaró, "El fue un diplomático consumado, capaz de mirar de frente a los dictadores y defender los intereses y valores de Estados Unidos, incluso bajo las circunstancias más difíciles".
Un tenaz diplomático que se ganó la reputación de "bulldozer" en las negociaciones de los Acuerdos de Dayton que pusieron fin a la guerra en Bosnia, Holbrooke fue alguna vez llamado "el diplomático favorito de Washington en último recurso" por la revista Time.
Nominado siete veces al Premio Nobel de la Paz, Holbrooke se sumó al gobierno de Obama en enero del 2009 como representante para Afganistán y Pakistán, lidiando con dos de los problemas de política exterior que más irritaban a Washington.
Nueve años después de la invasión de Estados Unidos que derrocó a los gobernantes talibanes en Afganistán, hay cerca de 100.000 soldados estadounidenses en el país enfrentando una insurgencia que ha sido fortalecida por su capacidad para hallar refugios en el vecino Pakistán.
Analistas no esperan que la muerte de Holbrooke tenga mucho impacto en un reporte que se debe entregar esta semana sobre la estrategia de Obama de aumento de tropas en la guerra de Afganistán.
La estrategia de Estados Unidos busca permitir que las fuerzas de seguridad locales gradualmente se hagan con el control y permitir el inicio del retiro de los soldados en julio del 2011.
Considerado como uno de los diplomáticos más capacitados de Estados Unidos, Holbrooke tenía una tensa relación con el presidente afgano, Hamid Karzai, quien se mantuvo en el poder después de las elecciones presidenciales del año pasado, las que fueron opacadas por reportes generalizados de fraude.
Algunos analistas creen que Holbrooke logró resultados mixtos en el mejor de los casos al buscar promover la política de Estados Unidos en Afganistán y Pakistán y que su influencia había disminuido. El podría ser recordado más por acercar a las partes en el conflicto de Bosnia.
"Los acuerdos de Dayton son el punto máximo de sus logros y creo que fue un punto de cambio en la política exterior del gobierno de Bill Clinton", dijo James Dobbins, otro diplomático estadounidense que sirvió con Holbrooke en escena de negociaciones de paz en París para terminar la guerra de Vietnam.
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