Era la primera vez y los muchachos de la bicicleta extrema quedaron felices.
Seis modalidades de la cicla, aparte de las ya tradicionales, se dieron cita en la pista Antonio Roldán.
Era el Interbike, idea que surgió de la Comisión Antioqueña de Bicicrós, que puso a volar las bicicletas en este espacio de Belén.
Para los muchachos fue la oportunidad de mostrar lo que han aprendido en el manejo de las bicicletas; las piruetas que marcan puntos dentro de lo arriesgado y atrevido que resulta el dirt jump.
De Castilla a la Unidad Deportiva de Belén, para mostrarse en "sociedad", en un certamen que congregó a 250 deportistas, en su mayoría del bicicrós.
Casi todos los que estuvieron allí son estudiantes, de colegios y universidades, que han visto en la bicicleta la respuesta a su apetito deportivo, que se ve aumentado por la aparición en firme y en forma de estas modalidades que cada día cobran más adeptos.
"Estábamos fascinados con esta experiencia", resaltó Carlos Andrés Tabares, encargado de congregar a su alrededor este núcleo de 30 deportistas del dirt que llegaron gustosos a la pista Antonio Roldán Betancur, donde estuvieron codo a codo con los bicicrosistas, los ciclomontañistas, los habilistas, los downhilistas, además de los del gravity que llevaron sus bicicletas.
Toda una dicha, con piruetas por montón, para goce y disfrute de una comunidad que ama lo que hace.
Pico y Placa Medellín
viernes
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