Parece una broma más, de esas que dejan escapar sus personajes, capaces de hallar rastros de humor incluso en la propia muerte: "Apenas estoy aprendiendo a actuar en cine, soy un alumno más de esa escuela", repite Álvaro Rodríguez, sentado en un andén de Andalucía, en el Valle.
"Lo que pasa -se le escucha decir con ironía- es que nunca he creído ese cuento de la fama. Desconfío de esos galanes que crea la televisión nuestra que de vez en cuando suben hasta Monserrate sólo para sentir cómo se ve Bogotá sin ellos".
Este hijo de Sevilla, municipio encumbrado en las montañas cafeteras del Valle, ha sido un invitado frecuente en nuestro cine. Las buenas noticias suyas comenzaron a llegarnos al comenzar los 90, cuando -como protagonista de La gente de la universal - se alzó con los premios de mejor actor en el II Festival Latinoamericano de Cine de Nueva Inglaterra y del Festival Latinoamericano de Cine de Nueva York.
Su trabajo actoral es el resultado de más de 30 años entregado a las tablas, especialmente las del Teatro La Candelaria y el Teatro Nacional en Bogotá. Y si uno esculca su extenso recorrido como actor, advertirá sin dificultad que no es posible entender las últimas dos décadas de la televisión sin que se asomen sus personajes.
Con Carlos Moreno, director de Todos tus muertos , repite, pues trabajó con él en Perro come perro.
Causa gracia que usted hable del nacimiento de la era de la gelatina cinematográfica...
"Suena gracioso, pero es verdad. Después de tantos premios internacionales, al fin se estrenó Todos tus muertos en Colombia. Esta es una película que se construyó con la identidad cultural de este país y, sobre todo, con la de Andalucía, con su gelatina. Créame, no será la última vez que un director piense en este municipio para rodar sus películas".
Durante las grabaciones, usted fue una especie de celebridad aquí...
"No le como cuento a esa vaina de la farándula. Preferí sentirme un habitante más y Andalucía fue muy hospitalaria conmigo. Con todos se podía mamar gallo. Pero si me ponía a aceptar todas las invitaciones que me hacían, iba camino de convertirme en borracho. A cada rato me convidaban a una cerveza. Y casi salgo de aquí rodando porque, al día, tenía hasta dos y tres invitaciones a almorzar. Un día me tocó almorzar en tres casas porque me daba pena decir que no".
Algunos sienten que esta película puede resultar difícil para el espectador promedio...
"Esta es una película sencilla, pero con un manejo profundo. Es una historia universal: a nadie le sorprende una montaña de muertos porque conflictos hay en medio planeta. Tocamos aspectos de la esencia humana como el miedo, la indolencia y el morbo, y por eso mucha gente asistió a los foros que se realizaron en Holanda y Estados Unidos. Rescato su estética, de ahí la dificultad de inscribirla en un género: tiene tragedia, comedia, surrealismo. Es una historia de muertos, pero sin sangre. La metáfora de la sangre está en un par de gallos. No es una película más sobre violencia".
¿El arte como forma de denuncia?
"Una de las razones de ser del cine es retratar los conflictos de la humanidad. El arte es una forma de subversión, el artista hace su trabajo porque le nace, porque le da la gana y como le da la gana. Ahora, el arte no pretende solucionar nada, es para divertir, pero ese divertimento en su complejidad implica también repensar y preguntarnos lo que somos y lo que hacemos en sociedad".
¿Qué le sugiere esa discusión sobre la violencia como argumento esencial del cine nacional?
"Es una discusión falsa. Mira lo que pasa con el cine italiano y el alemán, no han ignorado su pasado de sangre y de guerras. Los colombianos fuimos más inteligentes y le encontramos otro tono a ese tipo de películas".
¿Cómo asume todo esto que nos está pasando en nuestro cine?
"La historia de nuestro cine es muy corta. Estamos apenas aprendiendo a hacerlo. Soy optimista, hasta hace poco una película nuestra se estrenaba cada cinco o seis años. Ahora tenemos 12 películas por estrenar. Y hacemos de todo, comedia, drama, suspenso. Pero, hasta yo mismo me estoy replanteando como actor".
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