En esencia no fue creada para formar jugadores profesionales o llevarlos hasta el profesionalismo, pero por sus años de funcionamiento, la Escuela de Fútbol de la Liga Antioqueña ya cuenta con futbolistas que la dejan en alto, al igual que lo han hecho en las diferentes selecciones Antioquia.
Paulo Andrés García Laverde cuenta con orgullo que llegó a la Escuela en el año de su creación, lo hizo como parte de su práctica profesional y ya ajusta 20 calendarios en el lugar donde ha visto crecer a muchos deportistas que han logrado sus sueños.
“La esencia de la escuela no es el fútbol profesional, sino la formación de la base, pero desde el 2005 la entidad creó el Festival de Escuelas con el que le da competencia a los integrantes de las diferentes categorías, bajo la filosofía de la diversión”, comenta García, coordinador general de la escuela.
Pero por la institución han pasado jugadores que se han convertido en profesionales del fútbol y otras áreas como Carlos David Gómez, preparador físico que trabajó con Chicó y Águilas Doradas; Camilo Quintero, quien fue coordinador de la escuela y trabajó con el DIM y actualmente hace parte del cuerpo técnico del Junior; Wálter Rivera, de Atlético Nacional, y Freddy Molina, quien estuvo en el Pereira, entre otros.
Carlos Mario 'Cococho' Álvarez, el exjugador de Nacional, Quindío, Águilas, Once Caldas y Envigado, entre otros y quien fue formador en la institución, resalta la creación del Festival, torneo del que dice que, “gracias a su reglamento, permite que todos los niños inscritos jueguen, que sean felices con el balón, sin importar qué tan talentosos o competitivos sean”.
Además resalta que tras sus dos años como formador creó vínculos con sus dirigidos y con orgullo menciona a dos de los que han hecho el proceso completo y están ahora en el balompié profesional, como lo son Thomás Peláez, quien milita en el Atlanta de la MLS y el arquero Juan Sebastián Rojo, quien hace parte de las fuerzas básicas del Independiente Medellín.
Por allí también han pasado exjugadores como Alex Fernández, Néstor Piza, Carlos Danovis Muñoz y actualmente aportan su conocimiento y experiencia Camilo Giraldo y Carlos Jiménez.
Uno de los jugadores que hizo parte de la escuela y que no solo logró su sueño de jugar como profesional, sino hacerlo en Europa es Róbinson Blandón Rendón, quien en la temporada 2021 milita en el Naxxar Lions de la primera división de Malta y ha pasado por Leones, y las ligas de Liberia, también estuvo en el Kosice de Eslovaquía, Mexico, Venezuela y Costa Rica.
“Para mí la escuela de la Liga tiene un significado muy especial, allí empezó todo, luego estuve en otros clubes, pero siempre recuerdo con gran alegría y gratitud lo que viví allá y por eso me siento muy orgulloso de haber pasado por allí”, menciona el delantero que en las categorías inferiores se destacó como goleador de los torneos que hace la LAF.
Precisamente, Blandón marcó dos tantos en el duelo del fin de semana que su equipo ganó 4-1 ante el Zebbug Rangers que les permite ubicarse en la casilla cuarta con 33 puntos, en el club también juega otro colombiano, se trata de Juan Andrés Tenorio.
Juan Camilo Quintero, licenciado en Educación Física y especialista en Entrenamiento Deportivo del Politécnico Jaime Isaza Cadavid, dice que otro de los aportes que hace la Escuela de la Liga es rescatar o sacar de los círculos de violencia a los niños.
“Cualquier espacio que se cree para la práctica del deporte bajo la imagen de la Liga que siempre se ha caracterizado por los buenos resultados, es una posibilidad de robarle niños a la violencia, cumpliendo también con esa labor social que es tan importante y que es, en mi caso, uno de los proyectos de vida, el servicio al prójimo, a los niños, a las familias”, concluyó