En el partido del sábado, contra América, los aficionados demostraron su descontento por los malos resultados que ha obtenido el cuadro antioqueño en las primeras jornadas de este Liga.
Parece que el romance entre la afición de DIM y el equipo que dirige David González se acabó. En el partido del sábado, en el que el cuadro rojo perdió 1-0 con América, sucedió una escena que parecía sacada de ficción: los hinchas del conjunto local silbaban a sus jugadores cuando tenían la pelota y les corearon “ole, ole”, cada vez que los americanos hacían una serie de pases.
Esta situación empezó después del minuto 90+1, cuando los “diablos” anotaron el único gol del partido. “Jugadores, la puta de su madre, pa ver si ponen huevos, no le ganan a nadie”, corearon al unísono los más de 20.000 aficionados que llegaron al Atanasio, mientras los jugadores de América celebraban la anotación.
Ese canto se repitió durante cerca de un minuto. Después los hinchas de El Poderoso empezaron a pedir la salida de los jugadores y del entrenador. “Que se vayan, que no quede ni uno solo”, coreaba el estadio mientras los jugadores del DIM atacaban de manera desesperada, para ver si podían conseguir un empate “milagroso” en la última jugada.
Ese milagro no llegó y los hinchas del Medellín empezaron a abandonar las tribunas mientras le gritaban al entrenador “te quedó grande el equipo”, “fuera, fuera, fuera”, “qué vergüenza”.
Después de que el juez central terminó el partido, los seguidores que aún quedaban en las tribunas, empezaron a hacerles señales con los dedos a los jugadores, que se dirigían hacia el camerino con la cabeza agachada. “Que se vayan todos esos dormidos”, “saquen a esos malos”, agregaron los hinchas.
Cuando el entrenador David González iba a entrar al camerino la silbatina aumentó de tono. El exarquero se quedó parado en las escaleras, y mientras los aficionados le mostraban el pulgar hacia abajo, como diciéndole perdedor, él levantó los suyos y siguió su camino. “Me quedé guardando una imagen, porque después nos van a aplaudir”, dijo en la rueda de prensa posterior.
Los aficionados se pararon en el obelisco después de la derrota esperando que el bus del equipo saliera para seguir demostrando su desacuerdo y preocupación, pues el conjunto rojo jugará este miércoles contra El Nacional de Ecuador, en Quito, por la segunda ronda de clasificación a la fase de grupos de la Copa Libertadores.
Una eventual derrota del DIM en Ecuador podría agrandar la ruptura entre el equipo, el entrenador David González y los aficionados. El Poderoso de la Montaña no gana desde el 26 de noviembre de 2022, cuando derrotó 2-1 al América en duelo válido por el cuadrangular semifinal de la Liga Betplay.
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