En la llegada de la etapa de este martes se presentó una particularidad en el Tour de Francia, a causa de las altas temperaturas (33°C para el momento en el que terminó la carrera en los Alpes).
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En la etapa de este martes, muchos de los competidores terminaron fundidos y en el suelo tras cruzar la meta.
En la llegada de la etapa de este martes se presentó una particularidad en el Tour de Francia, a causa de las altas temperaturas (33°C para el momento en el que terminó la carrera en los Alpes).
Varios ciclistas se tiraron al suelo una vez cruzaron la meta, pidiendo agua. Terminaron deshidratados. Incluso, el ganador de la etapa, que fue el danes Magnus Cort, también terminó en el pavimento una vez ganó la etapa.
Y es que según varios estudios, el Tour está presentando temperaturas con 10 °C más que hace 20 años. Es decir que hoy los competidores se desplazan sobre caminos diez grados más calientes que hace dos décadas.
Por esa razón, los equipos trabajan en la implementación de nuevas técnicas que permitan a los deportistas soportar las elevadas temperaturas y evitar el golpe de calor. Los equipos invierten mucho dinero en crear nuevas telas e indumentaria que permitan una mejor circulación del aire y ayuden a refrescar a los ciclistas. Esto mismo también se aplica a los cascos, que se vuelven más livianos y con mayor ventilación.