En un video publicado en su cuenta de Twitter, Juan Camilo Maldonado, presidente del Consejo de Danza de Medellín, lanzó unas preguntas que comparten buena parte de los sectores de la cultura de la ciudad: “¿Quién le puede responder al sector de la cultura por qué los recursos públicos no se asignan de manera oportuna?”.
En conversación telefónica con EL COLOMBIANO, Maldonado insistió en un punto medular de su mensaje: en el interior de la administración Quintero hay un nudo que impide que las convocatorias públicas salgan a tiempo o que los recursos estén disponibles cuando la comunidad los necesita.
Citó el ejemplo del Desfile de Mitos y Leyendas –una de las banderas de la programación cultural de Medellín–: a esta altura del calendario, a menos de un mes de su fecha de ejecución tradicional, no ha salido una convocatoria para las comparsas y los colectivos interesados en participar.
El lío con las convocatorias abiertas a último momento radica en que los gestores culturales cuentan con poco margen para preparar proyectos creativos de calidad. “Si abren la convocatoria hoy y la dejan abierta una semana se tardan otra semana en definir los ganadores. Es decir, los ganadores tendrían menos de dos semanas para hacer algo que valga la pena”, dice Maldonado.
En este caso la prisa va en contra de la fortaleza estética y artística de los proyectos. Dicha percepción la comparte Jaiver Jurado Giraldo, presidente de Medellín en Escena, y va más allá: “En la administración del alcalde Daniel Quintero hemos tenido un desorden en el tema de sacar las convocatorias a tiempo. Ese desorden administrativo, que en parte tuvo que ver con la pandemia, debió haber sido superado en el 2021, pero eso no ha pasado”.
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Jurado menciona el caso de La red de creación escénica, un proyecto que para tener una incidencia real en la ciudadanía debería, en su opinión, comenzar a principios de año. “El lugar de salir en enero, estas convocatorias salen en julio o agosto”, dice.
También cuestiona algo que califica como un sello de la alcaldía de Quintero: el hecho de fragmentar las convocatorias. “En otras administraciones se sacaba un portafolio de todas las convocatorias de estímulos, de concertación, de salas concertadas, de premios. Al sacarse una convocatoria completa, que tenía que ver con casi toda la actividad del año, se tenía un norte claro”, dice. Ahora, cuenta el gestor cultura, se hace “un reguero de convocatorias, algo que atomiza la cultura y no permite hacer verdaderos análisis”.
Al respecto es concluyente: “La administración no se ajusta a los tiempos de la sociedad, sino que la sociedad tiene que ajustarse a los tiempos de la burocracia”.
El juicio de Maldonado es menos severo: dice que los funcionarios de la Secretaría de Cultura Ciudadana tienen toda la intención de hacer las cosas bien, pero hay un nudo administrativo entre las secretarías de Cultura, de Suministros y de Hacienda, que entorpece el buen funcionamiento del apoyo estatal a las gestiones culturales ciudadanas.
En el mensaje de Twitter, Maldonado le hace un llamado directo a Daniel Quintero: “ayude a su equipo eliminando el nudo en secretaría de hacienda o suministros que no les deja trabajar de manera óptima”, escribió.
Y al final de la tarde de este jueves también desde Danzamed reiteraron que el festival no se hará este año y el inconveniente con la convocatoria de Mitos y Leyendas.
Hasta el momento de la publicación de esta nota no ha habido respuesta oficial de la alcaldía. EL COLOMBIANO le escribió a la jefe de prensa de la Secretaría de Cultura y no recibió respuesta.
