Björn Borg y John McEnroe hacen parte de una de las épocas más doradas del tenis mundial, además de protagonizar una de las finales del torneo de Wimbledon -la de 1980- más épicas de la historia.
A ese partido final, Borg llegó después de ganar cinco finales consecutivas, mientras que McEnroe enfrenta su primera final en Londres, en un juego que marcaría el final de la brillante etapa del tenista sueco (ganó 96 torneos, entre ellos 5 Wimbledon, 6 Roland Garros y 2 Master).
La cinta narra la batalla que se dio entre los reconocidos tenistas en esos años, una rivalidad que traspasó el campo deportivo y se trasladó a diferentes escenarios.
Está calificada dentro del género dramático y tiene una duración de 110 minutos.
El director danés Janus Metz no quiere encasillarla como una película deportiva: “Entiendo la importancia de ese partido, pero esta es una historia universal sobre dos tipos muy distintos en apariencia y muy parecidos en la intimidad. Es sobre la agonía del éxito, y cómo manejas la lucha por un solo lugar en la gloria”, relató el realizador durante el estreno del filme en el Festival de cine de Zurich.
El papel de McEnroe fue para Shia LaBeouf, quien asegura que memorizó verdaderos pasos de baile para conseguir replicar el estilo del jugador. “Aunque lo más difícil fue aprender a romper las raquetas sin dañarme”, agregó el actor en Zurich.
Mientras que el sueco Svenirr Gudnason, de impresionante parecido físico con Borg, interpretó al rival de McEnroe.
Este es el top 5 de películas basadas en deportistas:
