El gol de Carlos Bacca, a los 30 minutos del primer tiempo, fue suficiente para que Colombia terminara en el podio de la Copa América Centenario, que culmina este domingo con la final entre Argentina y Chile (7:00 p.m.).
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Con el triunfo 1-0 sobre Estados Unidos es la cuarta vez que la Selección cafetera ocupa el tercer lugar del torneo más antiguo del mundo, ya lo había logrado en 1987, en 1993 y en 1995.
Pero más allá de que haya sido una presentación decorosa, la Tricolor dejó muchas dudas en su fútbol, nuevamente pesaron más las ganas y el amor propio que una buena elaboración de juego.
Colombia sufrió más de la cuenta como lo hizo a lo largo del torneo y evidenció que todavía está muy lejos del nivel de los rivales que definen hoy el campeonato, Argentina y Chile.
Estados Unidos llegó permanentemente al área de David Ospina, que nuevamente terminó como la figura de Colombia y cuando no fueron sus manos salvadoras, la falta de puntería y los palos, evitaron el empate del equipo anfitrión.
En ese desespero por igualar las acciones de los locales, le quedaron algunos espacios a los dirigidos por el técnico José Pekerman, pero tampoco tuvieron la tranquilidad necesaria para ampliar el marcador.
En fin, Colombia llegó a la Copa América con la intención de buscar el título. Sin embargo, demostró que sigue lejos del funcionamiento que sedujo a todos en el Mundial de Brasil y que dentro de la renovación que pretende el técnico, el tercer lugar es un buen premio, pero habrá que mejorar mucho para los duelos de eliminatoria de septiembre, ante Venezuela y Brasil.