Cambiaron de parecer: los reversazos que protagonizaron los presidenciables

Petro, Gutiérrez, Hernández y Fajardo, los cuatro candidatos más opcionados según las encuestas, han cambiado de parecer sobre diferentes temas en lo que va corrido de contienda presidencial de cara a la primera vuelta.

Gustavo Petro, Federico Gutiérrez, Rodolfo Hernández y Sergio Fajardo han cambiado de posición en diferentes asuntos sobre los que han hablado en la contienda presidencial en marcha. FOTO ARCHIVO

Ninguno de los cuatro candidatos más opcionados, según las encuestas, a llegar a la Casa de Nariño este año se ha salvado de un cambio de parecer en plena contienda electoral. Tanto Gustavo Petro como Federico Gutiérrez, Rodolfo Hernández y Sergio Fajardo han tenido reversazos.

Cada uno a su estilo y con sus banderas de campaña ha causado controversia en al menos una salida en falso en los últimos meses y sorpresivamente ha cambiado de parecer en la recta final de la contienda presidencial, de cara a la primera vuelta que se realizará este domingo 29 de mayo.

Estos reversazos de los candidatos se han registrado en torno a diferentes asuntos como el “perdón social” a políticos corruptos y parapolíticos, negociaciones con el ELN, aspersión aérea con glifosato y fracking, y opiniones sobre los demás aspirantes.

“El perdón social”

Una de las contradicciones que más generó controversia fue la protagonizada por el candidato del Pacto Histórico, quien inicialmente aceptó que Iván Moreno Rojas, condenado por el carrusel de la contratación en Bogotá, quería ser el “constructor” de su propuesta de perdón social, después de reunirse con su hermano Juan Fernando Petro en la cárcel La Picota de Bogotá.

“(Juan Fernando Petro) estaba hablando con Iván Moreno (...) él no es narco, no es parapolítico, fue corrupto. Él está en un proceso muy interesante desde el punto de vista personal. Lo que Moreno nos ha sugerido es ser constructor de algo que he propuesto que se llama el perdón social y eso se está discutiendo dentro de las cárceles”, dijo el candidato presidencial en La W.

Tras la polémica que desató el hecho de reconocer ese acercamiento con corruptos y tras revelar que incluso había parapolíticos interesados en hacer parte de ese perdón social, Petro se echó para atrás y aseguró que no tenía intención alguna de negociar con políticos que estén en las cárceles y trató de apartarse del tema.

El aspirante del Pacto trató de evadir toda responsabilidad en esos acercamientos limitándose a decir que la reunión se dio entre la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz –a la que pertenece su hermano–, que asegura que es una organización no gubernamental supuestamente independiente, aunque le ha hecho campaña públicamente a través de sus redes sociales.

Bandidos en la cárcel o en una tumba

El segundo candidato más opcionado, según las encuestas de intención de voto, también se ha echado para atrás en una opinión en particular. En enero pasado, Gutiérrez visitó la zona fronteriza de Arauca y aseguró que para los “bandidos” habría “cárcel o una tumba”.

“A partir del 7 de agosto, como presidente de la República, recuperaremos el orden y la tranquilidad de los colombianos (...) Perseguiremos a todos los criminales, así como ya lo he hecho. Y por eso los bandidos en la cárcel o en una tumba”, dijo el exalcalde de Medellín.

Esta opinión generó controversia ya que el candidato de Equipo por Colombia no contempló la posibilidad de diálogo entre sus opciones para quienes están alzados en armas, por lo que se consideró que sus únicas salidas eran dar de baja o atrapar a los ilegales.

El reversazo se dio a mediados de mayo, cuando Gutiérrez aseguró que estaría dispuesto a negociar particularmente con el ELN para que ese grupo armado deje las armas, poniendo condiciones como un cese al fuego bilateral.

“Mi propuesta es: dejen el cese al fuego indefinido y apenas ganemos la Presidencia, con ese cese al fuego unilateral e indefinido, nos sentamos a dialogar hacia dónde va Colombia”, dijo el exalcalde de la capital antioqueña.

Fracking, ¿sí o no?

El exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, también ha incurrido en opiniones contradictorias durante la actual contienda presidencial. En particular su reverazo se dio en lo relacionado con la práctica del fracking y el retorno del uso del glifosato para reducir los cultivos ilícitos.

Tras la divulgación de una tabla sobre las opiniones de los candidatos en la que se planteó que Hernández optaría por esas dos prácticas, salió a asegurar que no era cierto. “Yo no apoyo el fracking ni el glifosato (...) No se confundan”, dijo.

No obstante, la periodista Laura Camila Vargas le salió al paso a lo dicho por el candidato presidencial de la Liga de Gobernantes Anticorrupción y publicó un video en el que él le dijo que evaluaría los costos del uso de glifosato y haría un piloto de fracking.

Una alianza que no cuajó

Por su parte, Sergio Fajardo también protagonizó una situación contradictoria en lo relacionado con su competidor Hernández, pues aunque en las últimas semanas se reunió con él y habló sobre la posibilidad de una unión de cara a la primera vuelta, finalmente aseguró que son “diferentes”, pero solo lo hizo después de que toda opción de aliarse se frustrara.

En una entrevista en Rcn Radio, el exgobernador de Antioquia aseguró que ni Gustavo Petro ni Rodolfo Hernández son buenas opciones para Colombia, pero lo particular de esta crítica es que fue hecha justo después de ver frustrada una alianza con este último.

Incluso enfatizó en que el exalcalde de Bucaramanga es distinto a él. “Yo creo que es muy difícil encontrar una persona más distinta a mí que Rodolfo Hernández en términos de persona, pero me produce mucha simpatía”, señaló Fajardo.

Este domingo estos cuatro candidatos, que han tenido opiniones contradictorias, se enfrentarán en las urnas junto a los también aspirantes Enrique Gómez Martínez (Salvación Nacional) y John Milton Rodríguez (Colombia Justa Libres), buscando reemplazar a Iván Duque en la Casa de Nariño.