El presidente Gustavo Petro terminó por pedirle la renuncia a Martha Lucía Zamora, la directora de la Agencia Nacional de Defensa del Estado que había denunciado un caso de maltrato por parte del canciller Álvaro Leyva. Las razones para apartar a la funcionaria, argumentó el jefe de Estado, tienen que ver con las maneras en las que se estaba defendiendo a la Nación en los pleitos legales que asumió en su cargo.
“(Con Zamora) Teníamos una distancia sobre la manera como se ha llevado la defensa de la nación en varios temas y quiero profundizar de otra manera en eso que se llama defender el poder público, es decir, defender el interés general de la sociedad colombiana”, dijo el presidente Petro desde Dubái este lunes, cuando le pregutaron por la salida de Zamora.
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Es que Zamora –quien ya confirmó que abandonará el cargo– saldrá en medio de un escándalo que la involucra como víctima de un posible maltrato laboral por parte del canciller Álvaro Leyva.
La discusión se desató porque ambos funcionarios tenían visiones distintas sobre un proceso legal que se avecina contra el Estado colombiano por parte de la empresa Thomas Greg & Sons (anterior fabricadora de los pasaportes).
Desde que el choque saltó a medios de comunicación, el presidente Petro salió en defensa de su ministro de Relaciones Exteriores y este 4 de diciembre ratificó su posición.
La empresa Thomas Greg and Sons convocó a la Cancillería a una audiencia de conciliación como medida previa a una demanda que se alistan a interponer por casi 120.000 millones de pesos. Consideran que la Cancillería causó daños al declarar desierto un proceso licitatorio –que los había dejado con la calificación más alta– para continuar con la fabricación de los pasaportes en Colombia.
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“Yo quiero que exista una investigación penal. Desde el principio y públicamente yo pedí un proceso de esos, con unas cláusulas que en mi opinión predeterminaban un posible ganador —a la postre, pues hubo un solo oferente— y eso no podía ser, en mi Gobierno no se prefabrican licitaciones”, dijo el presidente.
La recomendación de Zamora era evitar el millonario pleito con Thomas Greg, porque habría altas probabilidades de perder. Sin embargo, la insistencia de Leyva y Petro es mantener desierta la licitación para la elaboración de pasaportes y evitar conciliar con la empresa que los fabricaba.
“Quiero que el mensaje quede bien entendido. En ningún proceso licitatorio que se haga de diversos temas puede haber un solo proponente; en ese caso siempre hay que decretar desierta la licitación”, puntualizó Petro.
En todo caso, dijo Petro, a Martha Lucía Zamora le aplicaron el pedido de renuncia para no generar afectación en su carrera profesional. El gobierno deberá rediseñar su estrategia de defensa de cara a la audiencia que se avecina con Thomas Greg and Sons el próximo 15 de diciembre.
Pero, como ante sala, hubo un fuerte encontrón entre Zamora y Leyva. El rifirrafe entre los funcionarios se habría presentado porque Leyva defiende la posición de no conciliar con la empresa en medio de una fallida licitación para la elaboración de los pasaportes en el país. La discusión saltó a la opinión pública que conoció del incidente en el que se señala al canciller de haber gritado a la funcionaria ahora saliente y de acusarla de, supuestamente, no cuidar al presidente Petro.
“No hubo gritos del canciller, ni permito que una institución pública se utilice para defender intereses privados”, dijo el viernes el presidente Petro en sus redes sociales al salir en defensa de Leyva.