Desde la base militar de San Lucas alcanzaron a observar el momento en el que el helicóptero MI-17 de matrícula 3395 –de fabricación rusa– se estrelló contra la manigua en el sur de Bolívar. Era la 1:50 de la tarde. En el siniestro fallecieron nueve miembros de la Fuerza Pública.
La torre de control intentó comunicarse con el piloto de la aeronave, el teniente coronel Jesús David Carvajal Rangel. Pero no hubo respuesta. Los oficiales activaron, entonces, los protocolos de búsqueda y rescate.
Los campesinos de la vereda Guaperia –ubicada en el municipio de Santa Rosa del Sur, Bolívar– fueron los primeros respondientes en el lugar del siniestro. El helicóptero se había estrellado en una zona boscosa. Los primeros socorristas se abrieron paso entre la vegetación en búsqueda de algún rastro de vida. Algunos de ellos alcanzaron a grabar el intento de rescate. En la zona llovía y el helicóptero no paraba de expulsar humo. Las latas de la aeronave se retorcían con el fuego. Los campesinos, mientras tanto, salían del lugar de impacto con restos de los cadáveres de los militares, pertenencias y otros elementos que permitieran identificar a las víctimas.
“Nosotros vimos que ese helicóptero estaba funcionando en el aire, cuando de un momento a otro se fue contra el suelo. (...) Ya no hay nada que hacer, vámonos que eso va a estallar. Corramos”, se alcanza a escuchar en el video que difundieron los pobladores de la zona.
El helicóptero estaba adscrito a la División de Aviación y Asalto Aéreo del Ejército Nacional. Su misión era abastecer a los militares de la Fuerza de Tarea Marte en el municipio de Arenal. Es que las fuerzas oficiales, en la última semana, han librado combates contra los ilegales del Clan del Golfo, criminales que han convertido la región en un cóctel de confrontaciones.
Solo durante este fin de semana en la zona han ocurrido enfrentamientos entre el Clan del Golfo y disidentes de las Farc. En la misma región el Clan sostiene choques con la guerrilla del ELN.
Una vez se conoció el siniestro, el Ejército envió hasta el lugar uniformados por tierra y aire para tratar de coordinar las maniobras de rescate. Pero reconfirmaron la trágica escena hallada por los campesinos.
“Lamento la muerte de los nueve integrantes del vuelo del helicóptero del Ejército que se precipitó a tierra y que estaba abasteciendo a tropas del sur de Bolívar en las operaciones contra el Clan del Golfo”, confirmó el presidente Gustavo Petro en sus redes sociales.
En este siniestro aéreo fallecieron el teniente coronel Jesús David Carvajal Rangel, el mayor Edward Andrey Rodríguez, el sargento viceprimero Diego Ramírez Bahamón, el sargento segundo Michael Villanueva Mancera y el cabo primero Cristián Ordoñez Caicedo.
Además de abastecer a la tropa, el helicóptero también trasladaba a cuatro soldados profesionales del Ejército. Se trata Jhon Arlen Olea Palmera, Sman Sanabria Guerrero, Jesús Montalvo Arroyo y Yeisson Mendoza Méndez.
“Al sitio se desplazará una comisión de la Inspección del Ejército y el Grupo de Investigación de Accidentes de Aviación (GRIAV), de la División de Aviación Asalto Aéreo, para establecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en los que habría ocurrido este infortunado hecho”, indicaron las Fuerzas Militares en un comunicado.