Un total de 540 soldados aislados, ocho bajo observación médica, uno de ellos con pronóstico reservado, es el balance de la situación de los militares pertenecientes a la Cuarta División del Ejército que se hallan bajo amenaza de meningitis en la ciudad de Villavicencio.
Ello después de que la bacteria cobrara la vida de un soldado originario de Córdoba, José Antonio Narváez, en hechos ocurridos esta semana.
El soldado con pronóstico reservado tendría esa condición luego de que estuviera en contacto con el militar muerto ya que personal del Hospital Militar de Oriente explicaran que en este caso de riesgo epidemiológico el protagonista no es un virus sino una bacteria de propagación directa a través de los fluidos de las personas.
El personal militar afectado por este riesgo hace parte del nuevo contingente, apenas ingresado el primero de agosto y se especula que precisamente los incorporados desde la ciudad de Montería, serían los que llegaron a la unidad militar con la bacteria.
La meningitis bacterial es más peligrosa que la viral y requiere atención inmediata por el daño cerebral que puede causar.
