En el municipio de San Luis están consternados por un hecho ocurrido este miércoles 28 de agosto que dejaría nuevamente en evidencia el poder que ha ganado el Clan del Golfo no solo en este municipio sino en buena parte del Oriente antioqueño.
El hecho ocurrió en la madrugada de este miércoles, cuando un bus de servicio intermunicipal se disponía a arrancar con destino a Medellín. Según testimonios entregados a EL COLOMBIANO, en el vehículo iba un hombre, un presunto integrante del grupo delincuencial El Mesa, cobijado con casa por cárcel y con brazalete electrónico, quien se dirigía hacia la capital antioqueña a una cita médica. Sin embargo, cuando el bus se disponía a arrancar abordó un hombre armado quien intentó atentar contra la vida del sujeto mencionado.
La rápida reacción de la policía evitó el homicidio, pues el comando de la policía está a una cuadra del lugar donde se encontraba el bus. Una cámara de seguridad de la zona registró cómo el presunto sicario desciende del bus custodiado por la policía con las manos en alto. Sin embargo, en cuestión de segundos cuando los uniformados se disponían a trasladarlo hacia el comando llegó una camioneta de alta gama de la que descendieron varios hombres, según las versiones, integrantes del Clan del Golfo. En instantes, y en medio de intimidaciones según se alcanza a ver en el video, estos sujetos obligaron el repliegue de la policía y lograron finalmente llevarse al hombre que habría subido al bus con el fin de cometer el homicidio. La presunta víctima logró huir del lugar.
El hecho se conoce el mismo día en el que la Mesa de Derechos Humanos del Oriente antioqueño lanzó una nueva alerta recogiendo testimonios en las comunidades que dan cuenta de la expansión de ilegales armados con armas largas que se estarían fortaleciendo a través de un corredor estratégico que conecta a los municipios de Cocorná, San Luis, Carmen de El Viboral y San Francisco. El Clan del Golfo estaría emulando la estrategia que utilizaron las Farc para copar ese corredor denominado el Camino de Islitas, el camino más antiguo conocido en el departamento y que es uno de los ejes más codiciados por los grupos armados porque permite conectar el Magdalena Medio con el corazón del Oriente antioqueño, llegando hasta el Valle de San Nicolás y el Valle de Aburrá.
La Mesa advirtió que a pesar de las reiteradas alertas las autoridades departamentales, locales y la fuerza pública han hecho caso omiso y señaló que en este momento la población civil de estos y otros municipios están en grave riesgo de quedar en medio de confrontaciones y de sufrir estigmatizaciones.
En los últimos dos meses la fuerza pública ha propinado varios golpes a las finanzas del Clan del Golfo. Precisamente en San Luis desmantelaron un laboratorio para el procesamiento de pasta base de coca a clorhidrato de Cocaína, que les generaba rentas por más de $5.200 millones. También han asestado golpes a la minería ilegal de oro en varias regiones en la Zona de Bosques, en municipios como San Luis, pero también en Zona de Embalses en localidades como San Rafael, Alejandría y San Carlos. Y además en Zona de Páramo, sobre todo en Sonsón y Abejorral, lo que da cuenta de la expansión en toda la subregión del Clan del Golfo.
