Tuvieron que pasar 443 días para que la sombra de las cabinas del cable del corregimiento de Palmitas volviera a proyectarse sobre los techos y a transportar campesinos, cosechas y estudiantes.
El 24 de junio de 2018 el sistema falló y toda una familia quedó atrapada dentro de una cabina, suspendida a 200 metros de altura. Su rescate tomó más de 12 horas, pero todos salieron ilesos.
Este martes a las 7:00 a.m. el cable entró de nuevo en funcionamiento. Paula Palacio, secretaria de Infraestructura de Medellín, explicó que el sistema de transporte aéreo fue sometido a una reparación en varias fases: una primera de diagnóstico para saber por qué falló, luego se hizo la recuperación de la cabina suspendida en el aire, un estudio técnico y finalmente las actividades de reparación y mejora de algunas condiciones eléctricas.
La reparación y puesta en marcha se realizó en convenio con la Universidad Nacional, tomó 3,5 meses y tuvo un costo de $350 millones que incluía el estudio de la falla, reportó Ricardo Giraldo López, gerente de Corregimientos de Medellín.
Giraldo explicó que unos 16 niños, estudiantes de la escuela La Aldea, son los más beneficiados pues los habían tenido que trasladar a un aula temporal porque no podían llegar al colegio. “Ellos viven en las veredas Morrón y Santa Teresa, para llegar por tierra se demoran dos horas y media, y eso que es una trocha. Desde hoy ya el recorrido es de 10 minutos”, dijo.
El cable opera de manera gratuita y, según los cálculos oficiales, es usado por unas 200 personas a la semana; en su mayoría campesinos. A eso se suman los turistas que los fines de semana llegan a conocer las zonas rurales de Medellín.
Giraldo hizo una invitación al cuidado de la infraestructura y reiteró que el sistema es seguro y confiable.