Un grupo de 1.080 jóvenes de Medellín está trabajando para cambiar su destino: han reemplazado las calles por espacios para la formación, la convivencia y el respeto. Ellos quieren oportunidades para salir adelante y a través del programa “Parceros” que impulsa la Alcaldía de Medellín, a través de la Secretaría de Seguridad y Convivencia, lo están logrando.
Ayer dieron prueba de ello. En un acto en el Teatro Metropolitano 284 de ellos recibieron un reconocimiento por haber emprendido la transformación de sus vidas.
Viven en las comunas más vulnerables de la ciudad, algunos ni siquiera habían salido de sus barrios y con el programa han conocido nuevos espacios, contó la coordinadora de “Parceros”, Sirley Lozano Díaz. La iniciativa busca que quienes están entre los 10 y 28 años de edad no se vinculen a estructuras criminales.
San Javier, Robledo, Altavista, Belén, Villa Hermosa, Guayabal, Santa Cruz, Manrique y Castilla son los sectores que se benefician, por ahora, con el programa.
La iniciativa comenzó en octubre de 2018 y durante esta primera etapa la inversión ha sido cercana a $2.000 millones. El personal encargado busca a cada joven en sus casas, en las calles y, finalmente, los invitan para que participen de las actividades que se realizan los sábados en el Jardín Botánico.
El proyecto cuenta con 35 profesionales que se encargan de hacer seguimiento a quienes se han vinculado. También hay 24 psicólogos que fortalecen el proceso y Fundación Bancolombia, el Colegio San José de las Vegas y Club Rotario Nuevo Medellín ofrecen sus servicios para la formación de los “parceros”.
Impacto social
En Colombia, el consumo de sustancias psicoactivas incrementa conforme aumenta la edad escolar, según una encuesta publicada en 2018 por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unocd).
Para Lozano, “Parceros” se convierte en esa forma de ayudar a los jóvenes a encontrar posibilidades diferentes al consumo y les abre oportunidades en cinco dimensiones: educativa, laboral, de servicios estatales, emprendimiento y aprovechamiento del tiempo libre.
Andrés Tobón, secretario de Seguridad, expresó que este proyecto será una gran herencia para los territorios pues la finalidad es arrebatarle a la delincuencia a estos muchachos. Se ha llegado a 2.500 jóvenes, de los cuales más de 1.000 han atendido el llamado para cambiar su destino.
Juan Camilo Arias, psicólogo y especialista en intervenciones grupales de la Universidad San Buenaventura, dijo que este tipo de espacios son importantes para los procesos sociales e individuales. La razón es que para los chicos es relevante hacer parte de comunidades que se convierten en referencia para ellos y comienzan a afiliarse a grupos a los que tienen fácil acceso. Por eso estas políticas les permite acercarse a otras posibilidades, diferentes a las de pertenecer a una banda criminal.
Reconocer a los parceros
De ahí que la ceremonia que se realizó ayer en el Teatro Metropolitano, con la presencia del alcalde Federico Gutiérrez, quien calificó el proyecto como espectacular y uno de los más bellos de la actual administración municipal.
“Parceros es darles oportunidad a los que no la tenían, es arrebatarles jóvenes a la violencia y es entender que cada uno tiene sueños y esperanzas. Tienen todo el apoyo nuestro y lo que queremos es que sean felices”, dijo el mandatario i
1.080
jóvenes y adolescentes se encuentran acudiendo a los espacios de formación.