María Laura de Jesús Montoya Upegui, conocida en tierras antioqueñas como la “Madre Laura”, murió hace 73 años en la capital paisa a la edad de 75 años, un 21 de octubre. Por esa fecha hoy se conmemora su día.
En su tierra natal las fachadas de las casas tienen izada la bandera de Jericó, en algunos exteriores también lucen la fotografía de la Madre Laura. A la religiosa se le tiene tanta fe que incluso muchos padres han decidido ponerle su nombre a sus hijas.
La santa Laura nació en este municipio, ubicado al suroeste, en el año 1874 y fue la primer santa colombiana canonizada: el 12 de mayo de 2013. En su día, paisanos y católicos la recuerdan al tiempo que hacen memoria de su legado.
“Fue una mujer con muchas virtudes y muchos talentos, relució por muchas cosas entre las que esta entregarse a los más desprotegidos como las comunidades indígenas y los afro y ese ejemplo es necesario para muchas personas hoy”, contó Humberto Peláez Gallego, fiel católico y miembro del centro de historia de Jericó.
Desde la niñez y a pesar de la oposición de su familia, la pequeña Laura hablaba y oraba con la servidumbre, mostrando ese espíritu misericordioso que le han resaltado. Por esto, para algunos jericoanos la santa Laura es la representación viva de esa tradición conservadora tan latente desde siempre en el municipio.
“Se ha convertido en un ícono y en una referencia importante de los valores cristianos, morales, culturales y cívicos que han acompañado mi pueblo a lo largo de la historia”, resaltó Peláez Gallego.
Hoy 21 de octubre la administración y la iglesia también se unen al centro de historia para promover la participación ciudadana en los diferentes actos que pretenden rememorar a la religiosa.
Mantener viva su memoria, un trabajo arduo en Jericó
El 26 de mayo, día en que se conmemora el natalicio de esta santa antioqueña, desde el centro de historia de Jericó se promueve la celebración del natalicio. Normalmente en esta fecha se celebra una misa en la iglesia, se hace un desfile o alguna actividad en honor al legado de la madre Laura.
Luego de la canonización de la madre Laura muchos católicos practicantes han tenido la curiosidad de visitar la casa natal de la santa en Jericó, lo que ha impactado en la recepción de turistas en el municipio.
“La beatificación empezó a despertar ese fervor por la santa, el querer conocer más de su vida y obra, un deseo que ha crecido, hay un grupo de misioneros que acompañan a las misioneras lauritas aquí que nacieron gracias al proceso de santificación”, reseñó Nelson Restrepo, presidente del Centro de Historia.
Al celebrarse el día de esta importante santa, Humberto Peláez reflexiona y dice que la madre Laura debe seguir siendo recordada porque fue una mujer que vivió muchas vicisitudes, persecuciones que incluyeron hasta a la misma iglesia en el pasado pues no era aceptado que se relacionara con grupos indígenas porque era mujer, pero ella se supo sobreponer a todo eso, recalcó.