x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

Sobre pensar

Pensar exige frialdad, carencia de pasiones, sentido del aquí y ahora por lo que es y no por su apariencia. Pensar es preguntarse.

18 de enero de 2025
bookmark
  • Sobre pensar
  • Sobre pensar

Por José Guillermo Ángel R. - memoanjel5@gmail.com

Estación Hacerse Preguntas, a la que llegan pocos porque ya muchos consideran que existen todas las respuestas y lo que dicen la Inteligencia Artificial o el deseo pareciera ser suficiente o al menos verosímil. Pero entre los pocos que llegan y que no son bien vistos, están los que aplican lo kantiano: qué pasó, por qué pasó y cómo pudo haber pasado (marginalidades del asunto); los seguidores de Shakespeare que encuentran detrás de las frases preguntas por hacer, en especial sobre el poder y sus oscuridades; los lectores de Canetti que saben que nada está completo y todo final es otro inicio, los que entienden (cartesianos) que si no hay dudas todo se queda en apariencias, los buberianos que entienden que sin diálogo no hay certezas y nada es una verdad sino una construcción entre varios, los lectores de Macedonio Fernández que aplican aquello de que lo contrario también es un camino, no importa qué tan absurdo sea (la técnica es muy talmúdica); los que hacen dibujos geométricos y unen rectas con parábolas, elipsis con vectores inesperados y ángulos que se abren y se cierran. En fin, pensar es un ejercicio y lo que ya es una verdad es un freno al conocimiento, cosa que asusta.

Baruj Spinoza, partiendo de la metafísica de Descartes (no creer que es una cosa sino por qué estamos en ella y haciendo qué), planteó que saber y conocer no es entender hasta que la idea no es completa, es decir, está libre de deseos y pasiones tristes que, para él, son elementos deformadores del asunto de pensar. Y esto de pensar, que es hacerse preguntas con sentido (por qué no se cae la luna, se preguntaría Newton; por qué el Estado que es un pacto para vivir sin miedo se desmorona, pregunta Norberto Bobbio), se ha ido transformando en un recordar con toda clase de confusiones. Aclarando, recordar no es pensar, es buscar en la memoria y esta es frágil y, si aparece el deseo, miente.

Pensar exige frialdad, carencia de pasiones, sentido del aquí y ahora por lo que es y no por su apariencia. Pensar es preguntarse (de aquí la inteligencia, entrar en el interior de lo que analiza), tener fundamentos claros que permitan estar bien en la vida (que es lo único que tenemos) para no perderse cuando se entre en el misterio (Maimónides lo profundiza en su Guía de perplejos). Y que esa pregunta hecha se dialogue para crear realidad (lograr una respuesta), para entrar en lo real que sigue ahí sin inmutarse.

Acotación: el mundo en que vivimos es un hervidero y mientras las cosas hiervan no están hechas sino saltando entre burbujas y calores (basta ver una sopa buscando punto). Y en esos hervores no se piensa, sino que se delira. Y el delirio, que es una deformación de la percepción, aconseja mal y lleva a todos los errores.

Sigue leyendo

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD