Las principales bolsas europeas cerraron la sesión de ayer con resultados dispares, aunque con predominio de las pérdidas, ante las dudas de los inversores que reaccionaron a estímulos contrapuestos.
En una sesión marcada por la avalancha de resultados empresariales en las dos orillas del Atlántico, los inversores tuvieron en cuenta, por un lado, la proliferación de contagios de coronavirus y las tensiones entre Washington y Pekín; y, por otro, la posibilidad de que EE. UU. apruebe una nueva tanda de estímulos.
En este contexto, la bolsa de Madrid subió un 1,06 % y la de Londres, un 0,4 %, mientras que Fráncfort bajó un 0,03 %; París, un 0,22 %; y Milán, un 0,59 %.
Previamente, en Asia, Tokio había perdido un 0,26 %, pero Hong Kong había ganado un 0,69 % y Seúl, un 1,76 %.
Wall Street, por su parte, cerró con pérdidas y el Dow Jones bajó 0,77 % en una sesión en la que las principales tecnológicas se vieron especialmente presionadas y con los inversores desanimados por las dificultades en las negociaciones de un nuevo paquete de ayudas por el coronavirus en EE. UU.
En el mercado petrolero los precios bajaron. El Brent, que es el crudo de referencia en Europa, cayó un 0,4 %, hasta 43,7 dólares por barril, y el West Texas Intermediate (WTI), referente en EE. UU., perdió 1,1 %, y ronda los 41,1 dólares por barril.
El oro, uno de los activos refugio en épocas de incertidumbre, sigue marcando máximos: ayer logró superar los 1.981 dólares por onza, aunque posteriormente bajó hasta cotizarse en torno a los 1.950 dólares.
En el mercado de divisas, el euro bajó respecto a la moneda estadounidense y se cambia a 1,173 dólares.