Nuevas prácticas en cultivos, facilidad de asociación y claves de negociar justamente, para ser sostenibles, es como Starbucks y la Agencia por el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (Usaid), aportaron a mejorar la calidad de vida de 4.000 familias cafeteras en Antioquia y otras 13 mil en Tolima y Cauca.
Durante tres años de esta alianza público-privada, han recibido asistencia técnica asociaciones caficultoras de municipios como Amalfi, Anorí (Nordeste) y Abejorral (Oriente), que hacen parte de los 24 municipios intervenidos por el programa.
Específicamente, se ha acompañado con análisis de suelos, manejo de aguas residuales en cultivos, protección de fuentes hídricas, entre otros elementos, como explicaron ayer los promotores en una rendición de cuentas públicas de la multinacional y la agencia estadounidense, en la tienda de Starbucks en el centro comercial Oviedo.
Por ejemplo, solo en Anorí se han beneficiado 230 familias, que mejoraron su tierra para obtener un mejor café que, de paso, les mejoró sus ingresos.
En el caso de Abejorral, Jonathan Esteban Botero, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda La Samaria, manifestó que son 50 jóvenes cafeteros que aprendieron a ver sus fincas como empresas y no como un simple cultivo.
“Recibimos un computador para llevar la contabilidad de la finca y ser parte de la renovación generacional que se requiere, además de hacer sostenible este cultivo”, aclaró el líder comunitario.
En ese sentido, la edad promedio de los productores en Colombia es de 59 años, es una población que se está envejeciendo y que requiere alternativas para un relevo generacional.
Por su parte, Luisa Fernanda Ramírez, representante de la Asociación Aprovocar, Chaparral (Tolima), y a la que pertenecen 52 mujeres, pudieron aplicar sistemas de tratamiento de aguas-mieles del café y mejorar la calidad de la tierra.
“Hemos podido mejorar en lo ambiental, con protección de fuentes hídricas y estamos en proceso de poder ser proveedores de Starbucks”, agregó la beneficiaria.