El paro de taxistas en el Valle de Aburrá finalizó este miércoles antes de la medianoche, luego de que los líderes gremiales llegaron a un acuerdo con el Gobierno Nacional para iniciar unos diálogos para buscar una salida a la problemática que los afectas, aunque sin la creación de una tarifa diferencial para el uso de los combustibles, que era la principal solicitud.
Se pactó que en próximos días sostendrán reuniones con el presidente Gustavo Petro y con los ministros de Minas y Energías, Ómar Camacho, y de Hacienda, Ricardo Bonilla, para buscar salidas a la crisis generada por el incremento de la tarifa de la gasolina, que llega a los 13.853 pesos en Medellín.
Estas manifestaciones, que contó con la participación de unos 300 taxis, finalizaron con un bloqueo en las afueras de la Secretaría de Movilidad de Medellín que comenzó sobre las 10:00 de la noche y que duró por casi dos horas, con pitazón incluida.
El balance que entregaron desde la Secretaría de Seguridad de Medellín indicó que 18 vehículos fueron vandalizados por cuenta de los manifestantes, entre los que se encuentra 13 taxis que no quisieron participar en estas protestas y a los que les chuzaron sus llantas o les quebraron sus vidrios con huevos o armas traumáticas.
También se registró el ataque a dos vehículos particulares, entre ellos el de un fotógrafo del periódico El Tiempo que realizaba cubrimiento a estas protestas en la vía Las Palmas, y tres tractocamiones.
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Además, la Policía capturó a dos personas por hechos de vandalismo y llevó al Centro de Traslado por Protección (CTP) a otras cinco, indicaron desde la Secretaría de Seguridad de Medellín.
Sobre la tarde de este miércoles se presentaron algunos disturbios en la vía al Túnel de Occidente, luego de que la Unidad del Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo) -antes conocido como el Esmad- hiciera presencia para desbloquear las protestas para facilitar la circulación de los vehículos que se dirigían desde y hacia el Occidente antioqueño, situación que se controló rápidamente.
Ninguna de estas situaciones dejaron personas lesionadas ni entre los manifestantes ni con las personas atacadas por algunas personas que se encargaron de empañar una protesta que se anunció como pacífica.
Finalizado estos bloqueos, las condiciones de movilidad del Valle de Aburrá retomaron a su normalidad, luego de las congestiones en los sitios de las protestas y circulación notoriamente fluida donde no se presentaba, “porque muchos conductores prefirieron no salir para evitar verse afectados por estas manifestaciones”, dijo John Jairo Vélez, supervisor de la Secretaría de Movilidad de Medellín.