A partir del 21 de enero, las autoridades mexicanas exigirán el visado de entrada al país a los ciudadanos procedentes de Venezuela como parte de una serie de medidas para frenar la migración irregular hacia Estados Unidos.
“Se ha identificado un incremento sustancial de nacionales de la República Bolivariana de Venezuela que ingresan al territorio nacional con supresión de visado con una finalidad distinta a la permitida, como el tránsito irregular hacia un tercer país”, señala un documento publicado este viernes por el Diario Oficial de México.
Las autoridades han recalcado que durante los últimos años se ha producido un fuerte incremento de las llegadas de venezolanos al país norteamericano, desde donde la mayoría pretende llegar a territorio estadounidense.
El Gobierno mexicano alertó que también han aumentado las declaraciones falsas sobre los motivos de viaje, la diversificación de rutas de tránsito y la identificación de algunos delitos asociados a la movilidad internacional, como la trata de personas y el tráfico de migrantes.
“México ha determinado de manera unilateral la aplicación de visados en pasaportes ordinarios a los venezolanos que pretendan ingresar al país como visitantes sin permiso para realizar actividades remuneradas, lo que hace necesario dar a conocer la medida y señalar los trámites vigentes que deberán realizar dichas personas para su ingreso al territorio nacional”, recoge el texto.
Aministía pide reconsiderar la medida
La organización Amnistía Internacional le pidió al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reconsiderar su decisión de solicitar visados a los venezolanos ante el aumento de su tránsito hacia Estados Unidos.
“Vemos con gran preocupación que esta decisión del Gobierno mexicano puede tener graves repercusiones en la vida de las personas venezolanas que buscan protección internacional en otros países de la región, incluyendo México”, expresaron en una carta abierta al mandatario mexicano.
Así mismo, la ONG advirtió que “la imposición de visados de ingreso podría poner en riesgo el derecho a solicitar asilo de personas venezolanas” y expuso que la crisis de derechos humanos ha obligado a más de 6 millones de personas a abandonar su país durante los últimos años.
En este sentido, Amnistía Internacional hizo un llamamiento a López Obrador para que reconsidere la decisión, de manera que se fortalezca el sistema de asilo para todos aquellos que buscan protección a nivel internacional.