Desde hace un poco más de 100 años, en la finca La Gabriela, comenzó una historia íntimamente ligada al café, una tradición que trascendió hasta extenderse a otras cinco fincas dedicadas al cultivo de café de alta calidad. Este legado, que tiene sus raíces en Los Farallones del Citará, en Ciudad Bolívar, proviene de una región colombiana única, reconocida por sus condiciones excepcionales para la producción del grano.
Desde esa tierra, el café emerge con notas y aromas que evocan una acidez controlada, dulces pronunciados, flores, hierbas y recuerdos afrutados, gracias a la combinación de minerales propios de la zona, la genética propia del grano y el proceso de beneficio. Es una experiencia sensorial que transforma este preciado grano en una bebida de calidad excepcional, que ahora puede ser disfrutada en todo el país.
La Comercializadora Cumbres, una empresa local con una larga tradición en el comercio de café, ha logrado unificar seis fincas cafeteras bajo la marca Madre Selva. Este proyecto tiene como objetivo destacar el café de especialidad colombiano, un producto que representa apenas el 5% de la producción mundial y del cual solo el 1% proviene de Colombia. Gracias a su enfoque en la calidad y el compromiso con las comunidades cafeteras, los granos de Madre Selva han llegado a los cinco continentes, conquistando mercados internacionales y posicionándose como un referente de excelencia en la industria del café.
Sin embargo, Madre Selva no solo busca llevar el café colombiano al mundo, sino también devolverlo a su origen. La marca quiere asegurarse de que el café de exportación, tan valorado en otros países, esté disponible para los colombianos. Con esta iniciativa, Madre Selva apuesta por acercar el café de especialidad al público local, permitiéndoles disfrutar de la misma calidad que se exporta a mercados internacionales. Es un esfuerzo por celebrar las raíces, resaltar las tradiciones y reconocer el trabajo de los caficultores que hacen posible que Colombia sea conocida como la tierra del mejor café del mundo.
“El nombre Madre Selva es un homenaje a la tierra que alberga estas fincas cafeteras”, explica Ricardo Restrepo, gerente general de Comercializadora Cumbres. “El total de las tierras productivas que Cumbres tiene en Ciudad Bolívar, el 30 % de su terreno es dedicado a la producción de café, mientras que el 70% restante se conserva como bosque nativo, permitiendo que las especies animales autóctonas de la región transiten libremente, sin restricciones”.
Un tesoro para tomar
Un café de especialidad, como Madre Selva, cumple con rigurosos estándares establecidos por la Specialty Coffee Association (SCA). Entre ellos, se destaca una puntuación mínima de 84,5 puntos sobre 100, lo que garantiza su calidad
excepcional. Además, cada grano tiene un origen y trazabilidad claramente definidos, lo que permite conocer su recorrido desde la finca hasta la taza.
El proceso de cultivo es meticuloso, asegurando que los granos estén libres de defectos, y el perfil sensorial del café es único, con una combinación armoniosa de aromas y sabores. Al disfrutar del café Madre Selva se experimenta una de las bebidas refinadas y perfectas que la tierra ofrece.
Para preservar la tierra y garantizar su fertilidad a largo plazo, practican la “agricultura regenerativa”, al emplear métodos tradicionales, como el uso de la guadaña y el machete, para mantener los cultivos en buen estado.
Disfrutar de un buen café
Aunque Colombia es tierra cafetera, históricamente no ha tenido la costumbre de consumir café de alta calidad, ya que la prioridad siempre ha sido el mercado de exportación. Sin embargo, eso está cambiando con la llegada de cafés de especialidad como Madre Selva, que ofrecen una experiencia única y de alta calidad. Para disfrutar de la mejor taza de café, se recomienda seguir estos consejos:
• Compre el grano entero y muélelo en casa o pida que lo muelan al momento de la compra para preservar su frescura y aroma.
• Elija la molienda adecuada para el método de preparación que usted utilice, ya que influye directamente en la calidad y consistencia de la preparación de cada taza de café.
• Fíjese en la fecha de tostión, ya que el café pierde intensidad en su sabor con el tiempo. Asegúrese de consumirlo cuando esté más fresco para disfrutar de su mejor perfil de sabor.
Para compartir y disfrutar
El mejor maridaje para un buen café es una compañía agradable. No hace falta azúcar ni ningún otro añadido; el café Madre Selva se disfruta por sí mismo en su máxima expresión. Para conseguirlo, así como cacao fino y de aroma, además de otros productos, ya sea para su degustación personal o como el regalo perfecto para estas fechas, puede adquirirlo en:
• Arkadia Centro Comercial, en la burbuja ubicada en el segundo piso cerca a la entrada de la 80.
• Viva Envigado, en el stand efímero del primer piso, ubicado en el Mercado de Santa o en el tercer piso, en la nueva zona Jardín Nómada.
• A través de cafemadreselva.com (tendrá un 10% de descuento si ingresa el código SELVACOL en el carrito de compras), con cobertura en todo el territorio nacional.
Para conocer las fincas en Ciudad Bolívar y aprender sobre el café verde, ingrese a Cumbres.
*Contenido en colaboración con café Madre Selva.