x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

Perdón, Señor Presidente

13 de junio de 2008
bookmark

No se necesita ser de izquierda o derecha para estar con usted. Basta con tener sentido de patria y amor por esta tierra para saber que usted entrega su existencia por la ingrata labor de hacer país, de invocar progreso y desarrollo para una nación que nos duele a todos, pero casi ninguno tiene el valor que usted posee para caminar por entre una jauría de leones mientras al mismo tiempo batalla por hacer de Colombia un país mejor.

Hoy ante los hechos, debo decir perdón señor Presidente. Soy tan solo uno más de ese porcentaje de colombianos que la fría encuesta dice que apoya su gestión. Perdónenos señor Presidente, por ser ese dato uno de los pocos indicios que quedan para saber que no está solo. Perdónenos porque a la hora de elegir nuestro Congreso, los padres de la patria, los ilustres representantes de la voz del pueblo, fallamos. Perdónenos por no elegir representantes y senadores que estuvieran a su altura.

Aún no entiendo tampoco, en qué momento la oposición perdió su sentido, en qué momento olvidaron que su única razón de ser es la necesidad de otro punto de vista que ayude a construir país desde una perspectiva diferente.

No sé en qué momento olvidaron que la oposición se ejerce sobre las ideologías y no sobre las personas, que las iniciativas no son buenas o malas porque provengan del partido A o del partido B, que las iniciativas no se transan, no tienen color, ni inclinación política, las iniciativas se toman o se dejan, si propenden por el bienestar de la gente del común, del ingeniero, del zapatero, del vendedor de confites, del celador o el carpintero.

Gracias por no dejarse derrotar por una presión que asfixia, que agota y que aún hoy no entendemos cómo después de seis años usted permanece en pie, firme, con la convicción clara y la transparencia intacta. Gracias por su honestidad, por su perseverancia, gracias por ser ejemplo para una generación que está entendiendo que solo el trabajo duro por las metas trazadas nos acerca a los sueños.

No pierda la calma, no gaste sus fuerzas respondiendo a quienes solo existen para destruir ideales.

Siga construyendo.

¿Buscando trabajo?
Crea y registra tu hoja de vida.

Te puede interesar

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD