Desde su calidad de líder político, tanto como desde su condición de dirigente gremial y promotor empresarial, Jaime Tobón Villegas fue un hombre cívico por excelencia que hizo del servicio a la comunidad su principal misión, en la que no tuvo tregua a lo largo de una fecunda vida, que terminó ayer a la edad patriarcal de los 95 años.
En Rionegro, donde nació y luego fue su alcalde, inició un ciclo vital que lo llevó por las más diversas actividades, sobresaliendo como educador y rector de la Universidad de Medellín y de la Universidad Libre.
La lucidez, un atributo del que gozó hasta el último momento, fue también un distintivo de su forma de actuar en la proposición de ideas y proyectos, como cuando promovió la creación del Palacio de Exposiciones, siendo alcalde de Medellín. De su gestión como burgomaestre se le reconoce el haber impulsado, con Empresas Públicas de Medellín (de la cual también fue gerente), la intervención de algunos barrios de la ciudad y la dotación de centros de salud.
Contribuyó igualmente a la consolidación nacional de importantes gremios como Camacol, Fenalco y Fadegan y de las instituciones ganaderas, así como la fundación del Banco del Comercio, la Aseguradora Mercantil y Almacenes Generales de Depósito (Almadelco) y la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño.
Sus amigos lo recordarán con cariño, extrañarán su amabilidad y don de gentes, y junto con su esposa, Norela Marín Vieco y sus familiares, lamentarán la ausencia física. Para ellos va nuestra voz de condolencia.
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