En las decisiones que toma el técnico Leonel Álvarez y en el funcionamiento del Independiente Medellín también tienen que ver los asistentes Édgar Pánzer Carvajal y Juan Carlos Gamo Estrada.
Como jugadores que fueron del club les duele mucho la camiseta del poderoso y esto incidió para que Leonel creyera en ellos y les diera ciertas responsabilidades que inciden de manera directa en el éxito del equipo rojo.
Mientras Leonel trabaja el ataque, Pánzer le dedica tiempo a la defensa y Gamo pone en actividad a los que no van a jugar.
Ser un asistente de piedra es lo que menos desea Pánzer. De ahí que "en todo el campeonato, incluyendo la final, también le haga, con respeto, correcciones y le pida a Leo que revisemos las fallas que cometimos, especialmente las de Neiva".
Carvajal vive feliz en el Medellín, porque "con Leo se trabaja sin envidias y con mucha transparencia". Eso les sirve para manejar el mismo idioma, pues su primer asistente también pide cautela, porque "no hemos ganado nada y tenemos que ser muy claros en los últimos 90 minutos que nos falta".
La autonomía del Gamo Estrada es similar. Su función especial es mirar más al contrario y comentarle a tiempo a Leonel sus fortalezas y debilidades.
Juan Carlos tiene credibilidad y antes del partido definitivo ante Huila la aprovecha para decirle "a los muchachos que mañana debemos jugar con inteligencia, aprovechando los espacios y respetando al rival".
Tanto Carvajal como Estrada tienen carta abierta para aportar y criticar con el afán de mejorar. Esto facilita su trabajo y hace que sean dos asistentes con voz y voto para buscar la quinta estrella del Medellín.
Pico y Placa Medellín
viernes
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