Hay historias, en los libros, el cine y la televisión, con un final que en ocasiones no es claro, pero que terminan, tienen un desenlace. Otras, más arriesgadas, dejan el final con un toque de misterio para que la audiencia, cada quien, se imagine lo que quiera y la remate a su modo.
También hay series, muchas, que no terminan. Los últimos capítulos dan la idea de que habrá un regreso, una nueva temporada pero no. Decisiones administrativas, económicas o hasta de picos de audiencia que no se cumplieron dejan a los juiciosos televidentes sin nada, desamparados a su imaginación.
“Cuando me ha pasado, me he sentido engañada. Uno entiende que son medidas abruptas, porque nada garantiza el éxito de una serie, pero sí considero que deberían al menos pensar con anterioridad que el bajo rating es una posibilidad y atar los cabos al final de cada temporada. Es una forma muy cruel de jugar con los gustos y las emociones de los televidentes”, afirma Paula Chaparro, crítica de cine y televisión.
Lo que hoy sienten los fanáticos de Sense8 es una emoción repetida, “me pasó con Firefly y con Surviving Jack. De la primera hubo película (Serenity) y tuvo una buena clausura, de la otra no y me la paso repitiéndola e imaginando qué pasó con los personajes”, concluye Chaparro quien no es la única que se imaginaría un final, triste o feliz, pero final al fin y al cabo.
Estas son otras series sin final
1. Alf
El afamado extraterrestre de los años 80 tuvo un último capítulo, en 1990, que dejó a todos con ganas de más. De esas escenas que gritan: continuará. La policía rodea a Alf en el momento en que una nave se dispone a recogerlo para irse con sus amigos. Así terminó y todos se quedaron con las ganas de saber el desenlace que luego se supo en una película años después.