Por casi dos horas la artista barranquillera Shakira deleitó a su público en el Parque Simón Bolívar de Bogotá en la noche del sábado.
Con este show, de boletería agotada, finalizó El Dorado World Tour con el cual visitó más de 20 países con una duración de seis meses exactos.
Bogotá, la ciudad que la vio surgir como artista y desde la cual se transformó en estrella mundial, fue la escogida para el cierre de esta esperada gira mundial.
Sus más fieles seguidores hicieron fila desde 24 horas antes del inicio del espectáculo. Poco les importó soportar el intenso frío y los torrenciales aguaceros que por estos días azotan la Capital del país, todo por ver a Shakira.
La espera había sido larga con siete años desde la última gira de la artista barranquillera y sin saber cuando volvería a los escenarios nacionales. Era un show imperdible.
Para ella también fue especial. No sólo era el fin de una de sus giras mundiales más exitosas de su larga carrera, también porque se encontraban en el lugar sus padres y era el único concierto en su país, por lo que la emoción la llevó hasta las lágrimas en varias ocasiones.