El viernes 4 de julio, a las siete de la noche, en el centro comercial El Tesoro, el actor y cantante colombiano César Mora presentará Mi vida es un bolero, un show que recorre las canciones que han sido importantes en su trayectoria artística y personal.
Reconocido por sus papeles en el teatro, el cine y la televisión, Mora también es un músico de larga data. En este campo su trabajo incluye la participación en El son del Pueblo y la composición de Canela, la canción que se hizo famosa por ser la preferida del comediante Jaime Garzón.
Siga leyendo: La Orquesta Filarmónica de Medellín tiene nueva directora, ¿quién es?
El espectáculo, que tiene una duración de 1 hora y 50 minutos, se ha convertido en un sentido homenaje a la figura materna del artista. “Este show es prácticamente una excusa para hacerle un tributo a mi madre”, confiesa Mora, quien recuerda con cariño cómo su progenitora le inculcó el amor por la música y la vida.
“Ella era una mujer convencida de que su hijo debía salir a la calle para aprender, me decía: 'Vaya para la calle, que las cosas están en la calle’”, dice el artista.
La producción musical está a cargo de Lucho Arroyo, ganador de cuatro premios Grammy y colaborador de Mora desde hace 25 años. Juntos han creado un repertorio que evita los lugares comunes del bolero tradicional, enfocándose en piezas que marcaron la vida del intérprete. “No montamos canciones solo porque sean populares, sino porque tienen un significado especial en mi historia”, explica el cantante.
Lea aquí: Así suena lo nuevo de Crudo Means Raw, Reina Valera
El espectáculo, que incluye proyecciones de fotos y videos personales, ha sido diseñado para crear una atmósfera íntima, como si el público estuviera en la sala de la casa del artista. Mora alterna las interpretaciones musicales con relatos que dan contexto emocional a cada canción.
Para el artista, no existe diferencia entre su trabajo como actor y como cantante: “En el teatro interpretas a otros personajes, pero en la música eres tú mismo. El bolero exige transmitir con autenticidad, sin artificios”. Esta filosofía se refleja en cada aspecto del espectáculo, desde la selección musical hasta la manera en que comparte sus vivencias con el público.