Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

Tribugá, en Chocó, listo para mostrar su mejor cara al turismo

El corregimiento se sumará a la oferta turística formal de Nuquí gracias a un emprendimiento comunitario.

  • Las aguas del Golfo de Tribugá, además de paradisiacas, garantizan la seguridad alimentaria de la población. FOTO esteban vanegas
    Las aguas del Golfo de Tribugá, además de paradisiacas, garantizan la seguridad alimentaria de la población. FOTO esteban vanegas
  • Tribugá tiene 1.600 hectáreas de manglar que sirven como nodriza de cientos de especies. FOTO marviva y alcaldía de nuquí
    Tribugá tiene 1.600 hectáreas de manglar que sirven como nodriza de cientos de especies. FOTO marviva y alcaldía de nuquí
14 de junio de 2021
bookmark

“¿Qué historia le queremos contar a la gente que venga? Una historia positiva”. Esa pregunta y esa respuesta surgieron durante el proceso de creación del proyecto de turismo rural comunitario en Tribugá, Nuquí (Chocó), que tiene a las 46 familias del corregimiento apurando el paso con los detalles finales para que se haga realidad a partir de julio próximo, cuenta Nelfer Valoyes Angulo, uno de los coordinadores de la iniciativa.

Nuquí, ese terruño costero de 956 kilómetros cuadrados, es ya un destino turístico posicionado que cautiva a 20.000 visitantes cada año, 40 % extranjeros, según cifras de la Alcaldía, gracias a su corredor de migración de ballenas, sus 7 kilómetros de línea de playa impoluta y cierto aire de paraíso suspendido en el tiempo.

Sin embargo, hasta ahora, Tribugá no había hecho parte de ese despertar turístico que sí disfrutan otros corregimientos como Coqui o Termales, que tienen una oferta turística sólida por parte de las comunidades que la habitan.

Kelly Rojas Correa, coordinadora del proyecto en la Fundación MarViva, explica que la dinámica de turismo en Nuquí se dio a partir de la cabecera municipal hacia el sur, con una oferta suficiente para cubrir la demanda de viajeros, porque las posibilidades al norte del municipio no se habían explorado lo suficiente.

Pero existe otra razón de fondo, conforme relata Nelfer, y es la violencia que, de manera cíclica, golpeó durante años al corregimiento forzando a sus habitantes a varios desplazamientos masivos en un término de 17 años. Aunque esto hace parte de su realidad, la historia que quieren contar las familias que regresaron a Tribugá es “sobre las tradiciones y la cultura que hoy siguen más vivas que nunca”, apunta.

Con la gestión de la Fundación MarViva, en alianza con Tamarin Foundation y apoyados por la Alcaldía de Nuquí y el Consejo Comunitario General Los Riscales, autoridad étnica del territorio, Tribugá pondrá su nombre en el mapa turístico del Pacífico con una experiencia centrada en los paseos en kayak y senderismo a través de sus 1.600 hectáreas de manglar, el más conservado y extenso de estos ecosistemas en la región y “la sala cuna de cientos de especies que sirven no solo para nuestro sustento, sino que atraen a los amantes de la naturaleza”, dice Nelfer, coordinador general del Circuito de Turismo Alternativo la Cumbancha, que vela por cumplimiento de los Planes de Manejo de Manglares del Golfo de Tribugá.

Sostenibilidad no es cuento

A pesar del crecimiento de la actividad turística, los nuquiseños han dejado claro que la protección y equilibrio de sus ecosistemas no está en discusión, comenzando por su resistencia, varias veces expresada públicamente, a que exista una vía que lleve a los viajeros por tierra al municipio, a través de la obra vial Las ánimas-Nuquí, argumentando que la barrera geográfica que obliga a las personas del interior del país a llegar solo por aire es necesaria para mantener un bajo impacto.

Otra muestra es su capacidad organizativa. La población afrodescendiente del municipio (cerca de 13.000 personas) está integrada a través del Consejo Comunitario General Los Riscales, mientras que los 1.663 indígenas que lo habitan se amparan bajo los resguardos: Río Chorí - Jurubidá - Alto Baudó, Río Nuquí y Río Panguí.

Según comenta William Klinger, director del Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico y oriundo de Nuquí, la noción de “colectividad y bien común” en el municipio tiene un particular arraigo. “Aunque es una población con la mayoría de sus necesidades básicas insatisfechas, antes de explotar los recursos de los que dispone hay una necesidad espontánea por conocer a fondo su territorio. De hecho, la poca exploración científica que se ha podido hacer en esta zona, reserva de un enorme potencial biodiverso de alcance mundial, ha sido gracias a la iniciativa comunitaria y al aporte de su conocimiento ancestral”.

Esto quedó de manifiesto con la creación del Distrito Regional de Manejo Integrado Golfo de Tribugá–Cabo Corrientes, en 2014, que se extiende por 60.138 hectáreas y que busca la conservación y restauración de los ecosistemas marinos y costeros, al tiempo que garantiza que cualquier iniciativa para el desarrollo local cuente con el aval de la comunidad y el respaldo técnico de organizaciones vinculadas.

Por ello, uno de los principales desvelos de las familias en Tribugá, según cuenta Nelfer, es definir con antelación la capacidad de carga ambiental de los manglares para que la actividad que van a emprender no altere este ecosistema que han cuidado siempre con recelo. “Hemos visto que esa prevención es la gran deuda de muchos lugares turísticos del país, y eso es lo que queremos evitar”, dice.

Por ahora están “organizando la casa” y ultimando detalles. Crearon la Asociación de Turismo Comunitario Lobos del Manglar. Entre los mismos integrantes del Consejo Comunitario han encontrado las personas que voluntariamente han capacitado a los guías que se encargarán de los recorridos, a quienes han orientado en la elaboración de los guiones interpretativos, primeros auxilios, servicio al cliente con oferta gastronómica y contabilidad.

La idea es que, a partir de julio, en plena temporada vacacional, se ponga en marcha la actividad en Tribugá, integrada a la dinámica turística del municipio, ofreciéndose como un pasadía.

“Esta es nuestra visión de desarrollo, no la que nos han querido imponer”, apunta Nelfer, refiriéndose al polémico proyecto del Puerto del Golfo de Tribugá, hoy suspendido, y el cual, dice él, que la mayoría de nuquiseños considera como una amenaza “irreparable a su territorio y subsistencia”.

Cuenta Kelly Rojas que la “implementación de este emprendimiento está pensado para que durante su primer año arroje información y experiencias que puedan ser replicables por otras comunidades costeras del país para que amplíen sus alternativas de desarrollo comunitario”.

También –explica– se adhiere a la dinámica de turismo nacional, a través de la estrategia de Fontur llamada “Pueblos que enamoran”, entre las cuales Nuquí fue elegido esta semana junto a otros 24 destinos entre 200 postulados, para ser particularmente visibilizados entre toda la oferta del país al cumplir con criterios tales como tener una vocación netamente comunitaria y demostrar que las características ambientales, arquitectónicas, además de sus tradiciones y cultura, están ampliamente preservadas

Infográfico
Tribugá, en Chocó, listo para mostrar su mejor cara al turismo
El empleo que buscas
está a un clic

Nuestros portales

Club intelecto

Club intelecto

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD