Detectives de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) están supervisando las tareas de las autoridades colombianas para dar con el paradero de la familia del extraditado Carlos Hugo García García, alias “Lucker” o “Chocolate”, que ya ajustó 38 días desaparecida.
Así lo informaron a este diario fuentes cercanas al caso, que solicitaron la reserva de su identidad. Al parecer los agentes estadounidenses temen que la desaparición de las cinco personas, presuntamente de manera forzada, sea una retaliación por la colaboración que el delincuente está brindando a la justicia de ese país, adonde fue extraditado por narcotráfico en 2012.
De confirmarse esta situación, se podrían generar venganzas y asesinatos en Valle y Cali, una ciudad con una preocupante tasa de 56 homicidios por 100.000 habitantes.
De acuerdo con la Policía, el 31 de enero pasado fue la última vez que se supo de la esposa de “Lucker”, Paula Andrea Díaz Carvajal, de 29 años. Ella conducía una camioneta KIA Sportage y viajaba con sus hijas Dana y Nicol García Díaz, de 4 y 9 años; y sus sobrinas Ailen Sofía Díaz y Maira Catalina Benjumea, de 3 y 17 años.
Se desplazaban desde el barrio Atanasio Girardot de Cali hacia el vecino municipio de Jamundí, para visitar a otro familiar, cuando les perdieron el rastro. El vehículo apareció abandonado al día siguiente en el barrio Los Alcázares, de la capital vallecaucana.
Desde entonces se desconoce el paradero de la cónyuge y de las cuatro menores de edad. La denuncia por la desaparición fue instaurada ante el Gaula de la Policía Metropolitana de Cali y el comandante de dicho grupo, el coronel Édinson Mosquera, le comentó al periódico El País que hay muy poca información disponible por ahora, por lo que no podía confirmar si se trataba de un secuestro.
EL COLOMBIANO se comunicó ayer con una persona cercana a la familia, quien afirmó que “no se sabe nada de las muchachas”.