viernes
3 y 2
3 y 2
Este miércoles, el presidente Gustavo Petro viajó hasta Caldono, Cauca, para conocer una iniciativa de internet comunitario y habló sobre la posibilidad de que estas iniciativas sean extendidas a otras partes del país y sean las Juntas de Acción Comunal las que lleven y administren las redes de fibra óptica en las regiones y barrios donde no llegan grandes compañías.
Para Petro, esta puede ser la manera más sencilla de llevar internet hasta las zonas más apartadas de Colombia. “Si aquí llega una fibra óptica, hay un aparatico, irradia, sin que lo veamos, una señal, entonces uno con la clave coge el wifi”, dijo.
El jefe de Estado cuestionó que sean empresas como Claro y Movistar las que lleven el servicio e instalen estas redes. “¿Por qué no la puede poner la acción comunal? ¿Por qué la juventud no puede?”, señaló Petro.
Petro sugirió que las comunidades no solo pueden organizarse para brindar el servicio, sino que también puede ser la oportunidad para emitir contenido producido por las mismas, por lo que no solo recibirían información, sino que también la emitirían.
La idea del presidente surgió tras su visita al resguardo indígena de Pueblo Nuevo, en Caldono, Cauca, a donde viajó con el fin de conocer su proyecto “La Red del Viento”, una red comunitaria de internet o comunidades de conectividad –como la comunidad las ha llamado–.
Petro anunció que buscará que esta iniciativa sea replicada en otras zonas del país, más aún porque es un punto que está consignado en su Plan Nacional de Desarrollo.
En la actualidad, esta propuesta cuenta con 54 puntos de conexión que, al parecer, benefician por lo menos a 500 y 600 personas en esta zona del país.
“Un pueblo informado es un pueblo consciente, un pueblo comunicado es un pueblo poderoso. Así que esta actividad de la Red del Viento, señora ministra –de TIC, Sandra Urrutia–, quiero que se extienda por todo el país. Esto no es comunismo, esto se llama democracia. Democracia es que cualquier persona, hombre o mujer, niño, joven o viejo, indígena o no indígena, mestizo o blanco, negro o negra, pueda ser realmente todos los días el verdadero dueño del poder”, señaló el jefe de Estado.
¿Será viable para todas las zonas apartadas de Colombia?
EL COLOMBIANO preguntó a Ana María Cárdenas Soto, ingeniera electrónica, con un doctorado en telecomunicaciones, y especialista en comunicaciones ópticas –comunicación a través de fibra óptica–, de la Universidad de Antioquia, respecto a la propuesta del presidente, y señaló que es importante hacer la distinción sobre los dos tipos de internet que existen y que la viabilidad de uso depende de las condiciones topográficas: fibra óptica, y medios radiados –sin cables–.
“La fibra óptica necesita un medio físico, un cable, y a través de ese se envían las señales y llevan nuestra información. Por lo que se apoyan en medios físicos, como los postes, mientras que los radiados solo necesitan una antena y tienen dos categorías: los que tienen un satélite para redirigir la información hasta el centro de operaciones de quien ofrece el servicio. Aunque en algunos casos, también se usan microondas terrestres. El país usa las dos”, explicó la especialista.
El servicio de fibra óptica, señaló Cárdenas, en la actualidad llega a 788 municipios, a 2.000 instituciones públicas, como hospitales, escuelas. “Hay un gran cubrimiento en todo el país, sin embargo, en las áreas más apartadas, algunas zonas de Chocó, Amazonas, Guainía, Casanare, Vichada, Vaupés, que son áreas muy extensas de baja densidad poblacional, allí se utiliza el acceso radiado”, apuntó.
Respecto a la cobertura, que es uno de los puntos que más opiniones de preocupación ha despertado, dadas las particularidades del sistema que Petro considera el mejor, la ingeniera considera que “el internet de fibra óptica, pese a que es un buen medio de transmisión, solo llega a unos 20 kilómetros desde la cabecera, tiene buena velocidad, bajo retardo, pero las comunicaciones inalámbricas –radiadas–, tienen mayor cobertura, pero están condicionadas por el ambiente”.
Frente al punto de vista económico, apuntó que “para medios como el de la fibra, se necesita que la población tenga un número mínimo de usuarios y esté relativamente condensada. Entonces por eso, en los municipios del país, en sus cabeceras municipales, esta se ha concentrado”.
Entonces, cuando se está hablando de zonas muy dispersas, “fincas, veredas, son zonas en las que llevar un cable técnicamente es muy difícil, y ahí se necesitan medios radiados. Ahí el costo por usuario se vuelve mucho más alto”, dijo.
El boletín trimestral de las TIC, en su más reciente informe, con corte a octubre de 2022, señaló que las empresas como Claro, Tigo y Movistar, en efecto, cobijan alrededor del 60% de la población. “Entre 100 mil y un millón, hay cinco operadores, entre 10 mil y 100 mil hay 21, y entre 100 y mil, hay 176, –las últimas cifras corresponden a municipios–, y no son puntos de internet comunitarios”, agregó Cárdenas, haciendo referencia al mismo documento.
“Y es ahí donde tengo una diferencia sobre si cualquiera puede prestar el servicio. No, tiene que tener un entrenamiento, tiene que tener un capital mínimo para infraestructura, conocimientos mínimos, hacer la negociación de quién le va a recibir el tráfico en el municipio, cuánto va a pagar por la capacidad, conocer a los proveedores, porque no solo basta tender el cable de fibra para que funcione ese ISP –proveedor del servicio de internet en español–, sino que saquen el tráfico del pueblo o la vereda, es decir, que mi búsqueda de TikTok me permita conectar con la información internacional que allí se aloja”, concluyó.
Periodista digital con interés en periodismo de datos, medio ambiente, genero y derechos humanos.