El próximo 10 de julio se cumple un año de haber iniciado el plan piloto de sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito en 11 veredas del municipio de Briceño, Norte de Antioquia.
Los habitantes de las poblaciones de Orejón, Pueblo Nuevo, La Calera, La América, El Pescado, Gurimán, La Mina, Buenavista, Altos de Chirí, Roblal y Palmichal se comprometieron en ese entonces a la no resiembra y a no estar involucrados en labores asociadas a los cultivos ilícitos ni a la comercialización ilegal, mientras que el Gobierno se comprometió a poner un plan de atención inmediata y generar procesos de construcción conjunta y concertada sobre el plan de sustitución y desarrollo alternativo.
A pesar de los compromisos tanto de las Farc como del Gobierno, en Briceño los avances en el proceso no son palpables y ha recibido críticas constantes del gobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez, quien asegura que en casi diez meses de trabajos, no se ha erradicado la primera mata de coca. Para esclarecer esas dudas, EL COLOMBIANO consultó, a parte del Gobierno departamental, a las Farc, representadas por “Julián Subverso”, guerrillero encargado de ese plan y a uno de los líderes veredales de Briceño. Este diario también buscó la versión del Gobierno nacional, sin embargo no fue posible llegar a un contacto.