Una serie de correos internos de la embajada de los Estados Unidos en Bogotá revelaron casos inéditos del llamado “síndrome de La Habana”, una serie de ataques -cuyo origen aún es desconocido- que pueden derivar en incapacidad laboral y lesiones cerebrales para los funcionarios estadounidenses, quienes parecen ser la mayoría de las víctimas.
Como si se tratara de técnicas de combate utilizadas en épocas de guerra, los afectados han empezado a reportar desde Colombia misteriosos “incidentes de salud” como mareos, dolores de cabeza y falta de concentración aguda: síntomas que podrían explicarse, según investigaciones del caso, por la exposición a microondas de radiofrecuencia dirigidas.
Pese a que esa aún es una hipótesis, pues el Gobierno norteamericano no ha compartido sus conclusiones, lo que sí se sabe es que la noticia se da apenas una semana antes de la visita del secretario de ese país, Antony Blinken, quien llegará a Colombia los próximos 20 y 21 de octubre para sostener varias reuniones oficiales.
En todo caso, los ataques recuerdan polémicos eventos de espionaje que se han vivido en el país con personajes que supuestamente han sido enviados desde países como Venezuela e Irán. El caso más reciente se conoció el pasado 8 de diciembre, cuando fueron expulsados dos ciudadanos rusos acusados de desarrollar actividades de inteligencia y espiar asuntos claves de la Nación.
Los antecedentes
Lo cierto es que, a pesar de que estos son los primeros casos que se reportan en Colombia, el llamado síndrome de La Habana fue diagnosticado por primera vez a finales de 2016, en Cuba.
Sin embargo, durante los cinco años siguientes se han ido reportando más víctimas en China, Austria, Alemania, India y el mismo Estados Unidos. De hecho, según una publicación del diario The New York Times, para mayo de este año se habían registrado 130 personas afectadas por ataques de ese tipo.