Alfonso Prada cerró 2022 con un sabor agridulce. Si bien durante su primer semestre como ministro de la política de Gustavo Petro logró tramitar con éxito en el Congreso iniciativas como la reforma tributaria, el Ministerio de la Igualdad o la ley de “paz total”, también tuvo que encarar los reparos a la ya polémica reforma política y la controversia por la excarcelación de jóvenes para ser voceros de paz.
En diálogo con EL COLOMBIANO, el ministro habla de lo que se viene en 2023 en el Congreso, desde el Plan de Desarrollo hasta la reforma pensional, hoy en entredicho por las declaraciones del presidente de Colpensiones, Jaime Dussán, sobre invertir los ahorros en infraestructura
¿Qué tanto pueden afectar al debate sobre la reforma pensional las declaraciones del presidente de Colpensiones sobre invertir los ahorros en infraestructura?
“Ninguna de las reformas que vamos a presentar va a ser sencilla. Todas son de cambio profundo. Cambiaremos los paradigmas en materia de salud y pensiones, como lo estamos haciendo con la reforma política o la Jurisdicción Agraria. Todas son motivo de polémica y debate, y vamos a estar listos a enfrentar la discusión con muchos argumentos, cifras y razones.
Tenemos la convicción profunda de que cada una de estas reformas le va a servir mucho al país y, especialmente, a la gente que más requiere el apoyo del Estado para el ejercicio de su dignidad humana. Con esa convicción vamos a enfrentar esos debates, no exentos de la controversia que van a suscitar”.
¿Ha tanteado el terreno con congresistas?
“Estamos trabajando en la redacción de los textos. Durante enero concretaremos los textos que vamos a someter a consideración del Congreso. En este momento, en lo que tiene que ver con reformas de carácter laboral, la ministra de Trabajo está avanzando simultáneamente en procesos de concertación con trabajadores y empresarios. Estamos haciendo la tarea y la preparación de lo que va a ser la legislatura”.
¿Debería renunciar el presidente de Colpensiones, como pide la oposición, para dar la discusión?
“El Gobierno se ha unificado alrededor de la posición que ha expresado públicamente el presidente. Esa será la ruta de trabajo en la que todos los funcionarios estaremos en el Congreso defendiendo la reforma pensional”.
Además de la pensional, ¿qué otras reformas vienen en este 2023?
“Lo primero que vamos a hacer es citar al Congreso a sesiones extraordinarias el próximo 6 de febrero. Ese día vamos a radicar el Plan Nacional de Desarrollo y, posteriormente, dentro de las mismas sesiones extras, presentaremos la ley de adición presupuestal para incorporar al presupuesto de las entidades los recursos aprobados en la reforma tributaria, que suman cerca de $20 billones. Esas serán las dos tareas fundamentales de febrero. Lo más seguro es que aprovechemos esas sesiones extras para presentar la reforma a la salud y la reforma pensional”.
¿Y en marzo, cuando el Congreso arranca sesiones ordinarias?
“En marzo arribaremos con el resto de reformas, que tienen que ver con servicios público y educación, y seguiremos tramitando las que vienen en curso, que son reformas constitucionales: la reforma política, la creación de la Jurisdicción Agraria, el reconocimiento del campesino como sujeto de derechos y la ley que regulariza el tema del cannabis. Desde esta perspectiva, la agenda del semestre será de lo más intenso que ha vivido el Congreso”.
La reforma política fracturó a la bancada por varios artículos polémicos. ¿Lo deja tranquilo lo que se aprobó?
“La incorporación de la lista cerrada, con paridad de género y alternancia entre hombres y mujeres, garantiza que, si se eligen 10 senadores, 5 van a ser mujeres. Eso genera legitimidad y representatividad real de la mitad de la población colombiana históricamente excluida. Sería una revolución en la política colombiana las solas listas cerradas con financiación pública y la prohibición donaciones en dinero en efectivo. Eso también va a ser un golpe muy duro, con el que pretendemos evitar que ingresen dineros de la mafia a la política.
Con solo estos puntos hay un gran avance en la profundización de la democracia colombiana. Ante cualquier debate adicional que genere críticas nos hemos comprometido –y vamos a cumplir– a convocar a unas mesas de trabajo entre enero y febrero. La idea es revisar cada uno de los artículos con los ponentes, con los voceros de los partidos y con los partidos mismos. Aspiramos a llegar en marzo con un amplio consenso nacional sobre esta reforma política”.
¿La paridad no quedó en riesgo con el parágrafo que aseguraría la reelección de los actuales congresistas en 2026?
“Ese parágrafo no asegura la reelección. Eso es falso de toda falsedad. La reelección de congresistas existe desde 1991 en la Constitución. Hay congresistas, en general, que son reelegidos permanentemente. Incluso, esta reforma limita la reelección a tres periodos para generar mayor posibilidad de rotación en las regiones en la representación. Es todo lo contrario a lo que se menciona.
Hay un parágrafo que ha generado inconformidad e inquietud, y es compromiso del Gobierno abrir ese debate nuevamente antes de la legislatura que comienza en marzo”.
El artículo que limitaba la reelección se había hundido, ¿revivió a última hora?
“Revivió en la conciliación. Nos gusta la limitación de periodos porque la renovación política nutre la democracia de nuevas personas y liderazgos. Eso refresca la política”.
¿Cuál es la posición del Gobierno frente al parágrafo?
“Nosotros no lo avalamos”.
Otro punto controversial es el que les permite a partidos grandes hacer coaliciones. Los minoritarios alegan que eso implicará que ellos desaparezcan...
“Partidos como La U, que fue gobierno durante dos periodos seguidos, hoy están a punto de ser minoritarios. Lo dicen los mismos congresistas. Por esa razón, ellos mismos, en compañía de otros partidos, propusieron ese artículo. El Gobierno ha sido más bien neutro en este debate; sin embargo, le doy mi opinión: los partidos que son mayorías pueden ser perfectamente minorías hacia adelante. Restringir esas posibilidades puede significar también la desaparición de partidos que se consideran mayoría.
Lograr que entre las minorías haya alianzas, o que una minoría se junte con un partido mayoritario o dos partidos mayoritarios que tienen identidad ideológica, fortalece el régimen de partidos y el sistema democrático. Este, que fue un debate también con mucha, crítica le faltan cuatro debates y habrá que reabrirlo”.
¿La reforma le está quitando dientes a la Procuraduría?
“Estamos cumpliendo un mandato legal del Sistema Interamericano de Justicia. No hay nada diferente a ello. No puede un funcionario de origen administrativo ejercer funciones judiciales que atenten contra la estabilidad democrática destituyendo a funcionarios que tienen origen popular. Esa es la sentencia del Sistema y por eso lo estamos dejando así en la Constitución, como debió consagrarse hace varios años”.
¿El otrora senador Petro votaría por la reforma tal como está?
“No me cabe la menor duda”.
Ante las heridas que abrió la reforma, ¿qué tan fuerte está la bancada de gobierno?
“Son normales los debates frente a los proyectos de ley y el trámite de los actos legislativos. Es natural. No sé por qué se elevan tanto esas discrepancias al punto de de decir que está en riesgo la coalición mayoritaria. Todo ello porque dos, tres, cinco o diez personas –en una coalición que llega a más de 150 congresistas en el caso de Cámara–, ejerzan discrepancias. Todo esto le exige al Gobierno más argumentos. Nos exige hacer mesas previas de trabajo, como las vamos a hacer, para mejorar.
En este tipo de heridas, como usted lo llama, yo encuentro solamente posiciones diversas. Además, todavía faltan 4 debates. El camino por recorrer todavía es muy largo y la coalición va a comportarse sólidamente, como lo ha hecho hasta ahora”.
Muchos de quienes han generado reparos son de la Alianza Verde, ¿cómo están los ánimos allí?
“Muy bien. Las relaciones están muy sólidas. Me he reunido con el copresidente del partido (Carlos Ramón González) y con congresistas. En general, las mayorías en el Verde están muy sólidas al lado del Gobierno, como lo están los demás partidos. La coalición arranca las sesiones de febrero con el precedente de ser una coalición disciplinada, coherente y que trabaja apoyando las iniciativas del cambio del presidente”.
En 2023 podría renunciar al Senado Roy Barreras, ¿ya saben cómo suplir la ausencia de semejante aliado?
“Roy Barreras ha sido un excelente presidente del Senado y un inmejorable parlamentario. En esa medida, lo único que deseamos es que nos siga acompañando los años que restan de trabajo desde el Gobierno y desde el Congreso. Ha sido un hombre que, con su inteligencia y capacidad de liderazgo, ha contribuido enormemente a esta democracia”.
¿Qué otras decisiones vienen para la excarcelación de jóvenes para ser voceros de paz?
“Lo único que hace la Comisión al reunirse es estudiar casos, revisar el nivel de complejidad y hacer recomendaciones al presidente. Él es quien tiene la facultad constitucional y legal para ser ejercida en el nombramiento de voceros de paz. Solamente él tienen la última palabra en este tema”.