Luego de cumplir una condena de 33 años de prisión en Estados Unidos y vivir 5 años en Alemania, Carlos Lehder volvió a Colombia. Desde su llegada el 29 de marzo, el exnarcotraficante cofundador del Cartel de Medellín se ha mostrado abierto a contar los secretos y detalles de las actividades delictivas que cometió en el pasado.
En entrevista con Caracol Radio, aseguró que está rehabilitado y arrepentido, y que su cartel no tuvo nada que ver con la toma del Palacio de Justicia.
Aunque estaba condenado a 135 años de prisión, el Gobierno estadounidense le ofreció un trato: confesar, cooperar y pedir disculpas públicas a cambio de rebajar su condena. En su caso, testificó contra el general panameño Manuel Antonio Noriega por sus nexos con el tráfico de drogas.
En cuanto volvió a Colombia, el juzgado 18 de ejecución de penas de Bogotá determinó que la condena de 24 años que en 1999 se había emitido en su contra por porte ilegal de armas, prescribió hace años.
Fue condenado el 24 de noviembre de 1995 por el Juzgado Regional de Santafé de Bogotá, que lo halló responsable por los delitos de tenencia y conservación ilegal de estupefacientes, armas de fuego y municiones de uso civil y privativo de las fuerzas armadas. Sin embargo, Colombia nunca pidió su extradición desde Alemania.
Actualmente asegura que aprendió su lección: ”Todo aquel que se involucre con el narcotráfico va a terminar en la cárcel o en el cementerio”. Además, hizo énfasis en que fue el sistema penal norteamericano el que lo reformó, y que una de las cosas que aprendió fue la importancia de contar la verdad. “Eso hace parte de la rehabilitación”, explicó.
La toma del Palacio de Justicia
En entrevista con el medio citado, Lehder resolvió dudas acerca del manejo del dinero en el cartel para financiar ciertos conflictos con el Estado. En concreto, la periodista Diana Saray le preguntó al excapo si era cierto que el Cartel de Medellín había financiado la toma del Palacio de justicia el 6 de noviembre de 1985.
Lehder respondió que esa es una de las mentiras que se han esparcido en medio del silencio que brinda la falta de comunicación, y aseguró que es una historia inventada para saciar necesidades políticas.
“Durante 40 años he permanecido en silencio y los muertos de esa era no pueden hablar, eso ha permitido que muchas fuentes, comerciales, no comerciales, gubernamentales... especulen acerca de los hechos. Entre ellos el tema del Palacio de Justicia”, explicó.
Y agregó: “Lo que yo sé es que, en Nicaragua, a Pablo Escobar lo llevaron a reunirse con el comandante del M19, Iván Marín Ospina. Ellos tenían relación por la guerra entre el M19 y el MAS, por el rescate de secuestrados de familias de narcos. Allá se estableció una tregua entre ambos: el M19 se comprometió a no secuestrar narcos”.
Después de eso, Lehder aseguró que en el momento de la toma del Palacio de Justicia, Pablo Escobar tenía planes de hacer una tregua con el Gobierno, no de atacarlo.
“Primero, según lo que me dijo Pablo, su posición después de haber asesinado al ministro de Justicia (Rodrigo Lara) era hacer una paz con el presidente Belisario (Betancur). Pablo no quería guerrear contra el gobierno de ninguna forma”.
Y aseguró que el causante de los rumores fue Jhon Jairo Velásquez Vásquez, miembro del Cartel de Medellín conocido como ‘Popeye’: “Segundo, quien inventó eso fue ‘Popeye’. Que en paz descanse, pero es un payaso. ‘Popeye’ era un cuenta historias ficticio, un culebrero. Él era chofer y luego lo vi cargando pistolas, pero él no tiene bases, nunca estuvo en Nicaragua (...) quien sabe quién lo propulsó a que dijera eso. Pablo no le financió ni cinco centavos al M19 para la toma del Palacio de Justicia, nosotros no sabíamos de la toma”, explicó.