Como una burla a las víctimas calificó Herbin Hoyos, presidente de la Federación Colombiana de Víctimas de las Farc, Fevcol, el nuevo acuerdo definitivo con esa guerrilla.
“Este texto que se conoció no trae ninguna respuesta a lo que se había planteado: exigimos que las Farc dieran algún tipo de razón sobre los secuestrados, los menores que tienen reclutados en sus filas, que entregaran las coordenadas de las fosas comunes y las de los campos minados como acción humanitaria, pero no hubo nada de eso”, explicó Hoyos, quien agregó que Álvaro Leyva, exministro y asesor de las Farc en temas jurídicos, dijo que esos temas nunca estuvieron en la mesa.
Acerca de los secuestrados, Fevcol entregó al Gobierno un listado con 468 casos recientes, aunque hay una lista superior de personas que pasaron a ser dadas por desaparecidos en el 2006, con 3.874 en total.
El apoyo
Cerca de 100 víctimas firmaron un comunicado respaldando el nuevo acuerdo en su integridad a través de “los diferentes mecanismos de participación ciudadana y movilizaciones como firmas, marchas, campamentos de paz y cabildos abiertos con el fin de garantizar su implementación y de esta forma lograr el pronto esclarecimiento de la verdad y la suerte de los desaparecidos”.
El comunicado agrega: “consideramos pertinente aclarar que las organizaciones de víctimas que se han manifestado en contra del nuevo Acuerdo no representan al universo de las 8 millones de víctimas de Colombia, ni a todas las víctimas de las Farc, ellos sólo hablan en nombre de sus afiliados”.
Entre los firmantes están la periodista Jineth Bedoya, agredida por paramilitares; los familiares de los diputados del Valle, la familia de Alan Jara; Yolanda Pinto, esposa de Guillermo Gaviria, y el excongresista Óscar Tulio Lizcano, secuestrado por las Farc; Contanza Turbay, cuya familia murió a manos de las Farc y quien tuvo que vivir por muchos años exiliada, y Teresita Gaviria cuyos familiares fueron desaparecidos.