En una carta de cuatro páginas, hicieron expreso su malestar con la administración.
Las diferencias entre la Alcaldía de Medellín y los recicladores de la ciudad se siguen ahondando. Desde 2020, los recicladores se quejan de que la administración no los ha escuchado. Ese año se estableció una mesa de diálogo que, según los conductores informales, no han tenido resultados efectivos.
Pues bien, una nueva dificultad se ha presentado con la entrada en operación del plan piloto de recolección nocturna. La Alianza Separa, que agremia a cerca de 1.500 trabajadores del gremio, emitió un comunicado en el que, con vehemencia, rechazaron el plan piloto y comentaron que este les resta su margen de maniobra.
“La propuesta de implementación de una segunda fase del proyecto piloto en Santa Elena, que implica la recolección durante solo uno (1) de los tres (3) días de recolección y una aparente “compensación” por las posibles pérdidas operacionales, es una propuesta inviable desde el punto de vista social, económico y ambienta”, reza el comunicado.
Como desde hace casi tres años, los recicladores insisten en que no se han dado pasos importantes para la inclusión y la dignificación de sus labores.
“En la dimensión económica nos preguntamos, ¿si existen recursos para “compensar” los perjuicios, ¿por qué no se determinan recursos para la inversión real y material en el fortalecimiento logístico de las organizaciones?”, cuestionaron los recicladores.
Finalmente, los recicladores dicen que están dispuestos a seguir el diálogo con Emvarias y las entidades del Distrito para buscar soluciones y que mejoren sus condiciones laborales.
