Quien más puso el dedo en la llaga por la falta de titulares en dos de las cuatro curadurías urbanas de Medellín, fue el gremio de la construcción, Camacol, al reclamar que esa situación de incertidumbre, en parte, generó una reducción del 33% en las iniciaciones de proyectos de construcción en la ciudad.
Ayer, tomaron posesión de su cargo los nuevos curadores urbanos Segundo y Cuarto, Luis Fernando Betancur y Manuel José Vallejo, respectivamente.
En Medellín, las dificultades recientes con estos despachos surgieron el pasado 23 de octubre cuando una acción jurídica contra el concurso de curadores abierto por la Alcaldía, y realizado por la Universidad San Buenaventura, en la que se alegó una presunta ilegalidad, generó que el Juzgado 4 Administrativo Oral ordenara la medida cautelar de urgencia y la suspensión del proceso.
Ahora que la Administración Municipal confirmó que los dos órganos ya tienen curadores en posesión, los constructores lanzaron una voz de optimismo para todo el sector.
Según Eduardo Loaiza, gerente de Camacol Antioquia, la decisión dinamizará la actividad edificadora en la región, con el desarrollo de proyectos de calidad. “Esperamos que con la posesión de los curadores 2 y 4, se construyan edificaciones y proyectos enmarcados en la formalidad y legalidad, y que permitan la seguridad y calidad de vida de la población”, apuntó.
En la Curaduría uno, está al frente Juan David Cuartas, que alega ante la Superintendencia de Notariado el derecho a permanecer 5 años más. Loaiza concluyó que “estamos a la espera de las decisiones que se tomen frente a la situación jurídica de esta, para garantizar el normal desempeño de la actividad edificadora”.