A 29 días para que se finalice la prórroga de vigilancia especial que le ordenó la Supersalud a Savia EPS, la ministra Carolina Corcho entregó en medio de un debate de control político este martes en el Congreso algunas pistas del futuro de la EPS antioqueña. Lo que dijo no fue nada esperanzador para las intenciones de la entidad de seguir operando.
Con un tono más conciliador que en intervenciones anteriores, pero igual de vehemente en su defensa de un rediseño del sistema de salud en el país, la ministra Corcho refutó las posiciones políticas y del gremio de las EPS frente a los procesos de liquidación. La ministra insistió en que, contrario a lo que alegan, las entidades que no cumplen con las exigencias sí ponen en riesgo la prestación del servicio porque tienen en quiebra clínicas y hospitales y por lo tanto deben ser liquidadas.
Y en ese sentido, pidió que cesen las recriminaciones ante el cumplimiento de las funciones de la Supersalud. “No puedes quitarle la eficacia sancionatoria al Estado, porque la Superintendencia se vuelve una burla. Es decir, si el Estado entrega billones de pesos a unas EPS para cumplir unos requisitos y no lo hacen, y no pasa nada, ¿qué pasa en este país? El Estado no puede permitir que haya mal uso de recursos”, dijo.
A renglón seguido empleó el caso de Savia Salud, señalando que varios senadores se le han acercado a decirle que si el Gobierno Nacional liquida Savia Salud “acaban con la prestación del servicio”. Pero Corcho asegura que lo que ocurre es lo contrario. “Es que ya Savia Salud está acabando con la prestación de esos servicios, porque la prestación de servicios no está a cargo de la EPS sino del hospital y Savia Salud le debe más de $700.000 millones a quien presta el servicio, a parte de eso es la EPS que más tutelas tiene, más de 25.000 peticiones, quejas y reclamos”.
Además reiteró que ese 30% de quejas son por casos en los que la vida de los usuarios está en riesgo. “Eso es gravísimo”, recalcó.
Corcho concluyó que el país debe dejar atrás la cíclica liquidación de EPS que luego obliga a un traslado masivo de usuarios a otra entidad, la cual, superada por la cantidad de usuarios y nuevas exigencias, entra en crisis y luego se enfrenta a un proceso de liquidación.
Las declaraciones de Corcho se dan después de que la Supersalud entregara sus conclusiones tras el seguimiento a Savia, concluyendo que en los primeros nueve meses del año se han recibido 25.778 peticiones, quejas y reclamos contra Savia Salud por fallas en la atención a los usuarios, de las cuales 9.603, es decir el 37,2 por ciento, corresponden a riesgo de vida.
El 90 por ciento de las quejas recibidas corresponden a la restricción en el acceso a los servicios de salud, seguido por insatisfacción del usuario con el proceso administrativo y deficiencia en la efectividad de las atenciones. Frente a la situación financiera y de solvencia, persiste el incumplimiento de la EPS en los indicadores de capital mínimo, patrimonio adecuado y régimen de inversiones. Para el mes de septiembre registraba una brecha de $565.337 millones en capital mínimo y $735.367 millones en patrimonio adecuado. Las cuentas por pagar a Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), para el periodo evaluado, ascendían a $579.647 millones.