Antioquia

Estudiantes migrantes de otras regiones, a la deriva

Sus familias están lejos, tienen problemas para pagar sus gastos básicos y el trámite para volver a casa no es claro aún. Universidades los apoyan.

Emergencia por covid-19 ha reducido los ingresos de sus familias, quienes solían apoyarlos para cubrir gastos. FOTO julio cesar herrera

Maria Paula Hernández Bergsneider

08 de mayo de 2020

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Diana y Pedro Torres son dos hermanos cartageneros que estudian en la sede Medellín de la Universidad Nacional. Ella tiene un crédito del Icetex y él es beneficiario del programa Ser Pilo Paga. Así cubren sus gastos. Sin embargo, tras finalizar el semestre en abril, dejaron de recibir los recursos, y las deudas ya se acumulan. Volver con su familia, además, no ha sido posible. El trámite es confuso y, como ellos, cientos de estudiantes foráneos siguen varados en la ciudad.

La misma situación la viven Santiago Jacob y otros 84 estudiantes oriundos de Putumayo; o Luis Vera y otros 20 de La Guajira. Sin recursos para sostenerse, han acudido al Ministerio de Transporte y a las alcaldías de sus municipios, sin obtener respuesta.

Algunos de sus coterráneos, narra Jacob, volvieron pidiendo cupo en camiones y evadiendo retenes. “Pero nosotros queremos volver acatando la norma”. Sin embargo, explica, no es claro si los cobija la quinta excepción del decreto -motivo de fuerza mayor-, si deben pedir permisos con las alcaldías de origen y destino, o si el retorno se gestiona con sus universidades.

¿Quién gestiona?

Mintransporte, con información de la Dirección de Tránsito de la Policía Nacional, informó que las universidades están encargadas de contactar a las alcaldías, gestionar los permisos, contratar a los buses y coordinar los traslados.

Sin embargo, Marcela Ochoa, directora de Bienestar Universitario de la U. de A., aseguró que, “aunque no somos ajenos a esta situación, no tenemos la capacidad institucional para movilizar a los 709 estudiantes que están en esta situación”. Explicó que no se cuenta con un sistema de transporte robusto y menos en las condiciones actuales.

“Algunos estudiantes, por ejemplo, proceden de resguardos indígenas, y no es nuestra competencia solicitar permisos de ingreso a estas zonas”.

De la U. Nacional son 400 los estudiantes en esta situación, afirmó Sergio Restrepo, director de Bienestar Universitario. De estos, 31 ya pudieron volver, pero lo consiguieron gracias a su propia gestión y la de sus padres ante los entes territoriales. “La Universidad solo financió el retorno. Nos dimos cuenta de que es más efectivo. Así, hoy viajan ocho para Huila”, asegura.

De otro lado, la Oficina de Comunicaciones de la Gobernación de Antioquia, explicó que los estudiantes entrarían en la quinta excepción del decreto y basta con gestionar personalmente los permisos ante las alcaldías y portar los documentos que comprueben la situación crítica.

Llegar por cuenta propia

A esto le apostaron Karol Arias y otros 118 estudiantes provenientes de Arauca, cuyos padres se unieron para gestionar con las autoridades locales un corredor humanitario.

Lograron viajar el pasado 6 de mayo. Y aunque la Alcaldía de Arauquita aseguró en sus redes que se trató de la “ardua gestión del Alcalde y el Gobernador”, Arias explica que la gestión estuvo a cargo de los padres, al igual que los recursos para el retorno.

Eso intentan otros 20 estudiantes de varias universidades provenientes del Cesar. Sin embargo Cristian Daza, estudiante de la U. Nacional, explica que la Gobernación de su lugar de origen les pide una prueba de que no están contagiados. El problema, agrega, es que muchos tienen sus servicios de salud en Cesar. Otros están en el régimen subsidiado y acceder a estas pruebas, enfatiza, no ha sido tarea fácil.

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estudiantes, solo contando U. de A. y U. Nacional, buscan regresar a sus hogares.