12
personas murieron tras desplomarse la torre 6 de Space en octubre de 2013.
6
torres o fases tenía Space. Cinco fueron demolidas por la Alcaldía de Medellín.
Sancionado, pero aferrado a un recurso de reposición que interpuso, el polémico ingeniero calculista del edificio Space, Jorge Aristizábal Ochoa, continúa ejerciendo su labor en Medellín.
La persistencia de Aristizábal en su labor ha generado una alerta para los curadores, que han recibido los proyectos firmados por él, y también ha apresurado la confirmación de las sanciones en su contra que adelanta el Consejo Profesional Nacional de Ingeniería, Copnia.
Jorge Aristizábal afronta un proceso judicial por la presunta responsabilidad en las fallas estructurales de conjuntos residenciales como Space, Continental Towers, Asensi y Calasania. Por ese último proyecto, el Copnia le impuso una sanción, en segunda instancia, de dos años para ejercer su labor, la cual el ingeniero apeló.
Sin embargo, la misma entidad pública encargada de inspeccionar y vigilar el ejercicio de la ingeniería y sus profesionales, le impuso al calculista Aristizábal una sanción, en primera instancia, en la que se le retira de por vida su tarjeta profesional, y le prohibe continuar ejerciendo su profesión.
Rubén Darío Ochoa Arbeláez, director general del Copnia, le confirmó a EL COLOMBIANO que antes del colapso de la torres seis del Space y las investigaciones de inconsistencias en esa estructura, Aristizábal ya afrontaba una sanción de dos años por errores constructivos en el proyecto Calasania.
“Por ese edificio ya se falló, tanto en primera como en segunda instancia, y se sancionó a Aristizábal, inicialmente, con dos años de suspensión de la matrícula profesional. Luego se le sanciona en primera instancia por el Space y se le quita la matrícula de por vida. Falta el último paso que va a segunda instancia para confirmar ese fallo”, indicó.
Ese segundo fallo, confirmó Ochoa, se definirá el próximo 16 de febrero en junta nacional de socios del Copnia, la cual integran los Ministerios de Transporte y Agricultura, la Sociedad Colombiana de Ingenieros, la Universidad Nacional, un representante de los gremios y uno de las universidades privadas.
Curadurías revisan con lupa
No obstante las determinaciones y restricciones del Copnia contra Aristizábal, Ángela María Restrepo, presidenta del Colegio Nacional de Curadores, curadora tercera y, en provisionalidad, encargada de las curadurías segunda y cuarta de Medellín, lanzó una advertencia inicial sobre la actuación del ingeniero calculista.
Restrepo afirmó que el último plano que se recibió de Aristizábal fue a finales del año pasado, en la Curaduría cuarta y el ingeniero oficiaba como revisor estructural. Agregó que no hay ninguna restricción del Copnia para que el calculista desarrolle su labor.
“Si me llega un plano de Aristizábal, lo miro con lupa, porque no lo puedo rechazar. No estoy asustada. Aquí todo es normal. Estamos en el país del Sagrado Corazón de Jesús. Él sigue ejerciendo su labor”, indicó.
Al respecto, Ochoa aseguró que a Aristizábal no se le podía prohibir el desarrollo de su labor previamente, “porque sancionamos lo que tiene que ver con la parte ético profesional y eso implica tener pruebas, y en las dos instancias”.
Agregó que como mecanismo inmediato para que Aristizábal no continúe haciendo cálculos estructurales de proyectos constructivos, la próxima semana se notificará la respuesta al recurso de apelación que hizo, y el cual le da la posibilidad de seguir ejerciendo su labor.
“Se espera que concluya el término legal que tiene de la apelación y queda declarado en firme el proceso, y de ahí en adelante no podrá firmar ningún plano. Hasta enero pudo haber firmado, pero tan pronto quede en firme la sanción no puede, en ningún momento, firmar un solo documento. Les queremos dar el mensaje a los ingenieros de que ser malo, hacer cosas indebidas, si cuesta”, acotó.
Un día antes de que la torre seis del Space se desplomara, el 11 de octubre de 2013, el ingeniero Aristizábal, diseñador estructural del proyecto, aseguró ante las cámaras de televisión que no existía ningún riesgo de colapso, a pesar de que Jaime Enrique Gómez, el director encargado del Dagrd, máximo organismo de atención de emergencias de Medellín, ordenó a los habitantes la evacuación del conjunto residencial argumentando señales de falla en una de las columnas.
En el hecho murieron 12 personas, 10 que trabajaban en el refuerzo de la estructura, un residente de otra de las torres que se encontraba en el sótano de parqueaderos y un vigilante.
Del prestigio a la censura
Tanto Ochoa como muchos profesionales del gremio de la construcción destacan la trayectoria de Jorge Aristizábal, su experticia y reconocimiento en el sector. Incluso, algunos lo consideraban un genio matemático.
Aristizábal se graduó como ingeniero civil de la Universidad Nacional en 1976 y participó con diseños estructurales de viviendas, unidades residenciales, empresas, universidades, colegios, centros comerciales, moteles, más de 1.800 proyectos ejecutados entre 1981 y 2007 en Medellín y municipios de Antioquia como Caucasia, El Carmen de Viboral y Rionegro, también en por lo menos otras nueve capitales: Bogotá, Cali, Bucaramanga, Tunja, Pereira, Cartagena, Montería y Barranquilla.
“Para Aristizábal sería duro porque era un ingeniero prestigioso, una persona que tuvo su problema, pero las pruebas dice lo que pasó”, explicó Ochoa.
Sobre la labor de Aristizábal, la Sociedad Antioquia de Ingenieros y Arquitectos (SAI) se pronunció, en su momento, afirmando que “este gozaba de reconocimiento por los más de 40 años de experiencia profesional y aportaba con sus conceptos en lo académico”.
La voz de Aristizábal
EL COLOMBIANO contactó al ingeniero calculista, Jorge Aristizábal, y le pidió su concepto sobre el desarrollo actual de su profesión y los procesos sancionatorios que le adelanta el Copnia.
“No tengo ningún concepto. Averígüelo usted. El periodista no es pues usted”, apuntó Aristizábal.
Si bien afectados tras las fallas estructurales de proyectos de la firma CDO y que contaron con diseños de Aristizábal, como Élkin Hernández propietario de una vivienda en Continental Towers, han reprochado la actuación del ingeniero y de la constructora, el Copnia justifica en el debido proceso los tres años que se tomaron para fallar en contra de Aristizábal.
Ochoa recalcó que durante el proceso la defensa de Aristizábal presentó pruebas “que dilataron el proceso”.
“Con el estudio que realizó la Universidad de los Andes se demostró que hubo faltas a los planteamientos técnicos, a los éticos y eso llevó a la sanción. ¿Por qué la demora, si pasaron tres años del Space? Porque tuvimos que esperar todas estas pruebas, indagaciones. A este proceso se presentaban representantes del Space hasta con nueve abogados, entonces ellos se defendían con patas y manos”, apuntó.
El Presidente del Copnia, confesó que no fue fácil tomar una determinación para sancionar a Aristizábal porque se dilató, pero cuando se hace la comprobación y análisis se demuestran faltas a la ética.
“Hay que mirar los diseños que firmó en esos tres años con lupa. Como no tenía la sanción como tal, habrá que mirar con todo el detalle, porque si está haciendo los diseños con los mismos errores que cometió, esos edificios van a tener inconvenientes. Se debe revisar si hubo mejoras, si se cambió”, sentenció Ochoa.
1.800
proyectos, aproximadamente, ejecutó el ingeniero
Jorge Aristizábal.