A todos nos ha pasado que de repente nos da hipo. Según la Mayo Clinic, estos son espasmos reiterados o movimientos repentinos del diafragma que no pueden controlarse. El diafragma, dice la entidad, es un músculo que tenemos que separar el pecho del área abdominal y tiene un papel importante en la respiración.
Para saber más: ¿Qué tan real es que si te tragas un chicle se quedará ‘pegado’ en el estómago?
Lo que produce el sonido característico del hipo, “hip”, es cuando las cuerdas vocales se cierran de repente. Esto no representa ningún riesgo y puede suceder a cualquier edad, incluidos los bebés.
Las causas del hipo pueden ser haber comido en exceso, tomar bebidas alcohólicas o carbonatadas. También una emoción repentina podría producir este fenómeno. Suele durar pocos minutos y en muy pocos casos, puede durar meses. Si esto pasa, es común que ocasione pérdida de peso y agotamiento extremo.
Es por esto que si el hipo dura más de 48 horas o si es muy intenso como para causar problemas para comer, dormir o respirar, se debe asistir inmediatamente al médico, pues podría tratarse de un problema más grande.
Una causa prolongada del hipo puede ser el daño o irritación de los nervios vago o frénico, que asisten al diafragma. Según Mayo Clinic, entre los factores que lo pueden dañar son: un pelo o algo en el oído que toca el tímpano; un tumor, quiste o la glándula tiroides del cuello, ácido estomacal que sube por el esófago, que es el tubo muscular que hace transitar la comida desde la boca hasta el estómago y dolor de garganta o laringitis.
El medio CNN habló con Ali Seifi, médico neurointensivista, que contó la historia de un paciente suyo que mientras se recuperaba de una operación por un traumatismo cerebral, le dio hipo en el hospital.
“Se volvió hacia mí y me dijo: ‘Doctor, estamos en el siglo XXI. Ustedes tienen tratamientos para el cáncer, para los accidentes cerebrovasculares, para los infartos, pero no para una cosa tan sencilla como el hipo”, dijo Seifi, director de la unidad de cuidados intensivos de neurología y profesor asociado del departamento de neurocirugía del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio.
Lea más: ¿Por qué nos da sueño luego de comer? La ciencia detrás del ‘sueñito’ después del almuerzo
Fue por eso que creó una herramienta similar a un tubo de plástico parecido a un popote que aumenta la presión para bajar el diafragma cuando se bebe y que es eficaz para detener el hipo.
Sin embargo, durante generaciones, han existido varios tratamientos caseros para tratarlo.
¿Asustarse quita el hipo?
Para el hipo se han difundido, generación tras generación, varios tratamientos caseros que no han sido ajenos para los expertos. Algunos de ellos, han sido aprobados por entidades como Mayo Clinic.
Por ejemplo, se sabe que para el hipo funciona respirar dentro de una bolsa de papel, hacer gárgaras con agua helada, contener la respiración y beber sorbos de agua fría.
Otro tratamiento, que las personas han intentado durante generaciones, es el famoso susto para quitar un hipo. Respecto a esta opción, el experto Ali Seifi expresó que tanto esta como los demás tratamientos, son válidos.
Esto ocurre porque el susto puede afectar los nervios asociados al hipo. Esto está relacionado con el nervio vago, que se centra en una señal distinta a la que le envía el diafragma, por lo cual puede desaparecer.