Los datos y las imágenes revelados por el informe especial El mercurio, un monstruo dormido en Antioquia, de Santiago Cárdenas, reportero investigador de nuestro portal digital, y Manuel Saldarriaga, fotógrafo, ganadores del Premio Rey de España, son señal de lo necesarios que son los periodistas para filtrar y auscultar, entre la abundancia de acontecimientos, los asuntos que impactan y afectan a la sociedad, y por supuesto a la más cercana, la nuestra.
El trabajo de ellos, con sus fotos y con otros recursos de periodismo multimedia, además de “buena documentación y ejemplos para plantear vías de solución”, como lo observó el jurado internacional, sirvió para retratar la contaminación que produce el uso desmedido de elementos tóxicos en la minería del oro: 100 toneladas de mercurio caen a los cauces de Antioquia cada año y los ríos San Agustín, Tarazá, Nechí, Porce y Cauca, están entre los más contaminados de Colombia, lo cual afecta y envenena zonas de cultivo y peces para el consumo.
El periodismo contemporáneo tiene hoy amplísimas posibilidades de enriquecer su oferta informativa mediante los recursos digitales, inmediatos y versátiles, pero es en la investigación, en el rigor documental y en la capacidad de inmersión en los hechos y los procesos humanos en donde el oficio se carga de valores agregados y diferenciadores.
Lo destacaba ayer el Rey Felipe VI en la entrega de los premios, al resaltar la “capacidad de adaptación” del periodismo ante los nuevos retos que plantean las tecnologías, pero sin perder de vista “su importante función social”. Por ello el interés en estimular a reconocidos exponentes, de un altísimo nivel, del periodismo iberoamericano. Circunstancia que también destacó Jesús Gracia, secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, quien apreció el riesgo y la vocación de verdad expresada con imparcialidad y rigor por los ganadores de la Trigésima Tercera Edición del Rey de España.
Para la Casa Editorial El Colombiano es motivo de orgullo que esta distinción se sume a las ganadas el último año, ante organismos y asociaciones internacionales, en categorías de Innovación, Diseño e Impresión. Ello nos impone nuevos retos y compromisos con las audiencias.
Por supuesto la notoriedad del Rey de España obtenido también afianza la credibilidad y el respeto del que goza el periodismo colombiano en el continente y en el mundo. En la ceremonia de este miércoles en Madrid, Santiago y Manuel compartieron honores con figuras de la talla del escritor Mario Vargas Llosa, ganador del XII Premio Don Quijote de Periodismo, también auspiciado por la Corona Española.
Las temáticas de los trabajos distinguidos sirven de sensor frente a las preocupaciones recientes de la humanidad: el desarrollo tecnológico (en África), los derechos de los presidiarios y su resocialización (en Argentina), la violencia contra las mujeres (en Bolivia), el hermanamiento de pueblos que estuvieron en guerra (en Portugal y Congo), la explotación sexual (en Brasil) y el medio ambiente (en Colombia).
Un espectro temático amplio, en medio de la variedad de plataformas periodísticas disponibles hoy. Y un esfuerzo sostenido de redacciones y colegas de toda Iberoamérica que no cesan en su deber y su responsabilidad con audiencias cada vez más exigentes e inquietas, en un mundo interconectado.