viernes
0 y 6
0 y 6
El redactor de una revista deportiva entró hecho una furia en el despacho del director. Se plantó ante la mesa del jefe y fue tan conciso como tajante: “¡Eres un fascista!”, gritó. El director respondió con suavidad: “Gracias, pero por la vía del halago no vas a conseguir nada de mí”. El redactor quedó mudo.
La anécdota ilustra de forma indirecta un fenómeno contemporáneo. Que ciertos políticos se sientan reconfortados cada vez que les llaman fascistas no es nada extraordinario: revela por un lado...
ESTE CONTENIDO ES EXCLUSIVO
PARA SUSCRIPTORES
¿Ya sos un suscriptor? Iniciá sesión
Al realizar el registro de tus datos por medio de estas redes
sociales, aceptas los términos y condiciones, de tu
información personal y el uso de tu información por terceros
de El Colombiano disponibles www.elcolombiano.com
y el envío de noticias a tu correo.
SI YA ESTÁS REGISTRADO
Iniciá sesión con tu correo y contraseña
¿QUERÉS SER UN SUSCRIPTOR?
TENEMOS PLANES DESDE
$14.900,
Seleccioná el que más te convenga:
9 razones más para compartir tus datos con EL COLOMBIANO