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Columnistas | PUBLICADO EL 18 diciembre 2022

Comentarios sobre conversaciones con el ELN

La posibilidad de llegar a acuerdos con el ELN sobre el cese temporal del fuego y de las hostilidades, es complicada mientras no se avance en la ‘Paz Total’ con otros grupos.

Por Alejo Vargas Velásquez - vargasvelasquezalejo@gmail.com

Se realizó el primer ciclo formal de conversaciones del gobierno de Gustavo Petro con el ELN en Caracas y vale la pena hacer algunas anotaciones – basado en la experiencia derivada de haber acompañado esfuerzos anteriores de otros gobiernos desde instancias de la sociedad civil -. Señalando de entrada que el principal y valioso avance es empezar a fortalecer la confianza entre las partes, que están de una u otra manera involucradas.

En primer lugar, lo que podría considerarse positivo: el nombramiento de Otty Patiño como jefe de la delegación del gobierno, en la medida en que es una persona conocedora de esos temas, cercano al presidente y con experiencia, serenidad y tranquilidad para manejar esa compleja negociación. Igualmente el que se hubiera incluido en la delegación del gobierno a personas que participaron en las conversaciones de La Habana con las FARC porque eso permite aprovechar esas experiencias. Igualmente la presencia de militares tanto en situación de retiro, como en servicio activo – estos por ahora en condición de observadores -, porque eso introduce miradas importantes para el manejo de aspectos esenciales. El fundamental acompañamiento internacional, incluida la Misión de la ONU y la representación de la Conferencia Episcopal Colombiana, que además de generar tranquilidad al ELN, permitirá consolidar y ampliar el indispensable acompañamiento internacional para este tipo de procesos.

En segundo lugar, lo que generaría cierta preocupación: no estoy tan seguro de que delegaciones tan numerosas de las dos partes sean lo recomendable para avanzar, a no ser que se precisara en cada caso quiénes son los delegados plenipotenciarios y quiénes cumplen más un rol de asesoría. Porque no hay que olvidar que existirán instancias de participación de la sociedad – como finalmente la Mesa lo defina -, donde habrá posibilidad de una gran diversidad de opiniones, y no sé si propuestas como la señalada por algunos congresistas, de una Mesa Técnica, podrían ser un apoyo útil para las conversaciones.

En tercer lugar, lo que consideraría más complejo: en el corto plazo, la posibilidad de llegar a acuerdos sobre el cese temporal del fuego y de las hostilidades, especialmente mientras no se formalicen por parte de la oficina del Alto Comisionado de Paz las conversaciones hacia la ‘Paz Total’ con otros grupos – disidencias de las extintas FARC o del crimen organizado - con los cuales el ELN tiene confrontaciones regionales por control de territorios, como parece ser el caso de Arauca con remanentes de las FARC, o en la Costa Pacífica con el llamado Clan del Golfo; si se presiona la concreción de acuerdos de cese del fuego en las actuales circunstancias, lo más probable es que se generen incumplimientos y tensiones innecesarias en la Mesa de Conversaciones. A mediano plazo, uno de los problemas difíciles y ojalá las dos partes – en principio de manera informal, quizá - lo comiencen a abordar, es el tema de las armas del ELN, porque no hay duda de que sobre ese tema el ELN es muy susceptible y ojalá esa insurgencia haya empezado a dar discusiones internas en esa dirección.

Por último, sugeriría, especialmente a los medios de comunicación, pero igual a las dos delegaciones y a los ciudadanos, tener tranquilidad y especialmente paciencia para desarrollar este importante proceso de conversaciones.

Adenda: En relación con lo aprobado en primera vuelta de la Reforma Política lo que me genera preocupación y rechazo es: i) la puerta giratoria entre los congresistas y los cargos en el ejecutivo; ii) la opción que se abre al transfuguismo político que es una pésima señal para consolidar partidos políticos y iii) que no se tenga claro que el nuestro es un régimen político presidencialista y no es un régimen parlamentario ni semi-parlamentario

Alejo Vargas Velásquez

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