“Estamos esperando que un Tratado de Libre Comercio (TLC) se negocie con Colombia, pero no significa que las empresas neozelandesas no hagan desde ya negocios con Colombia”.
Así lo dijo a EL COLOMBIANO Peter Chrisp, director de la Agencia de Desarrollo de Exportaciones de Nueva Zelanda (Nzte, por sus siglas en inglés), después de más de dos años de que el presidente Juan Manuel Santos abriera la posibilidad de un acuerdo bilateral y que hasta ahora está en la orilla de las intenciones.
Aún no hay pasos concretos y el comercio entre ambos países es realmente pírrico: el 0,018 por ciento de las exportaciones colombianas fueron a Nueva Zelanda en 2014, es decir, 17 millones de dólares, básicamente en café, flores y azúcar; mientras de ese país solo llegaron el año pasado 12 millones de dólares, en aparatos electrónicos, equipos para el agro y muy poco de semillas para pasturas ganaderas (ver gráfico).
“Tenemos toda la intención de ayudar a mejorar a los granjeros colombianos y, por ende, sus ganancias. Sin duda, un TLC ayudaría mucho en ello, pues Nueva Zelanda con un número similar de vacas a Colombia produce cuatro veces más leche”, agregó el ministro de las Industrias Primarias, Nathan Guy.
Entre tanto, ya hay 34 compañías neozelandesas, de distintos tamaños y tanto de servicios como productos agropecuarios, que buscan abrir mercado en Colombia, según Nzte.
Lo hacen mediante distribuidores locales o atendidos desde otros países de Suramérica, como Chile, con el cual Nueva Zelanda ya tiene un TLC.