M anuel Merino, presidente de Perú hasta ayer, solo duró seis días en el cargo. Llegó allí luego de que el Congreso, entidad que presidía, decretara la vacancia presidencial contra Martín Vizcarra el pasado lunes, en medio de acusaciones de corrupción y por “incapacidad moral”.
Al mediodía de ayer, cuando terminó su declaración en rueda de prensa anunciado que dejaba el cargo tras varios días de movilizaciones, las cacerolas y las cucharas de los peruanos sonaron prácticamente al unísono, festejando su dimisión, pero sin olvidar que lo que esperan es un cambio de 180 grados.
Semana violenta
El tránsito que ha vivido este país en la última semana no ha sido tranquilo; los reportes oficiales apuntan a que por la represión uniformada fallecieron dos manifestantes: Jack Pintado, de 22 años y Jordan Sotelo, de 24 años, mientras que los heridos llegan a 94 y los desaparecidos a 41.
Sobre los decesos, Essalud, la empresa de salud social del Estado peruano, aseguró que Pintado recibió 11 impactos en el cráneo, rostro, tórax y genitales. En el caso de Sotelo fueron cuatro heridas en el tórax “a la altura del corazón”, según precisaron medios locales.
El Tribunal Constitucional le exigió a la Policía “la inmediata ubicación, identificación y puesta a buen recaudo” de los desaparecidos.
Análisis y contexto
“Los peruanos estamos reclamando además de la renuncia de Manuel Merino –ya se dio–, que se vayan todos. Eso quiere decir que se vayan todos los congresistas que actualmente tenemos”, dice desde Lima, la capital, la politóloga María Fernanda Castro Rivas, quien atendió a EL COLOMBIANO en medio de las movilizaciones.
Mauricio Jaramillo Jassir, docente de Relaciones Internacionales de la Universidad del Rosario, explica que lo que se ve en este momento es un descrédito de la clase política.
“La gente está cansada de que el fujimorismo maneje las cosas a su antojo”, dice el analista, al recordar que tuvo que ver con la salida de Pedro Pablo Kuczynski, el presidente que fue electo con voto popular, pero que no pudo terminar su periodo, al renunciar el 23 de marzo de 2018.
Lo que viene
El Congreso discutió anoche quiénes integrarían la nueva mesa directiva.
Este paso es clave, pues según la Constitución, quien presida el Congreso asume como presidente interino de la República, según explicó Luis Valdez, presidente encargado del Congreso.
Hasta las 8:00 p.m., hora máxima para recibir candidatos, solo se presentó una: Rocío Yolanda Angélica Silva Santisteban Manrique, como presidenta; Francisco Sagasti, primer vicepresidente; Luis Roel, segundo vicepresidente y Yessica Apaza, tercera vicepresidenta.
Sin embargo, la lista no consiguió los 60 votos que necesitaba (42 a favor, 52 en contra y 25 abstenciones). El Congreso deberá convocar a una nueva presentación de listas para dar fin a la vacancia.
Entretanto, Jaramillo no considera que este agite termine pronto y plantea que adelanten las elecciones. “No veo ninguna opción distinta a un gobierno que solo esté a cargo de las elecciones”.
Ambos consideran que si no se da un paso hacia una renovación de la clase política, será complejo que Perú recupere la gobernabilidad.